María quiere ser tu amiga

Publicado el 26 febrero 2019 por Aleon @Aleonpizarro
de Laura Marshall.


Título: María quiere ser tu amigaAutora: Laura MarshallEditorial: Duomo, 2019Páginas: 450
SINOPSIS.
TU VIDA EN LAS REDES SOCIALES YA NO SERÁ LA MISMA
Cuando Louise Williams recibe un mensaje procedente de alguien de su pasado muy lejano, le da un vuelco el corazón.
«Tienes una solicitud de amistad pendiente de Maria Weston. » 
El problema es que Maria Weston desapareció hace más de veinticinco años, tras la fiesta de fin de curso del instituto. Todo el mundo cree que está muerta, especialmente Louise, que ha vivido durante este tiempo custodiando un terrible secreto. 
Sin embargo, los mensajes de Maria continúan, y cada vez son más escalofriantes. ¿Quién los envía?Al reconectar con los viejos compañeros y tratar de averiguar qué sucedió realmente aquella noche, Louise descubre que hay muchas cosas que desconocía. 
IMPRESIÓN PERSONAL.
Supongo que a estas alturas a nadie se le escapa que las redes sociales e internet en general significa tener abierta una ventana a tu vida privada, una ventana que escapa a tu control porque desconocemos quien se está asomando a ella. Da igual que tengas un nick que no se identifica con tu nombre, que no tengas tu foto puesta o no declares tu ubicación física. Tarde o temprano, en algún momento, por alguna vía te descubres: compras algo, utilizas el móvil como el tom tom para moverte o sin nada de eso, tu dirección IP es transparente para cualquier informático medianamente diestro. Dentro de nada mucha gente podrá ver que es lo que tienes en la nevera o cuando pones la lavadora más allá de tu vecina curiosa que se asomaba a la ventana.
Esto es lo que le ocurre a Louise Williams. Ella usa Facebook aunque de forma esporádica y ligera. Pero un día recibe una de esas solicitudes que todos recibimos. Lo malo es que la solicitud de amistad parece venir del más allá porque se la manda una compañera del instituto con la que no se portó nada bien y, que ella sepa, está muerta. Así que alguien con muy mala "baba" la está suplantando y quiere evidentemente asustar y fastidiarle la vida a Louise, alguien que debe saber lo que pasó hace tiempo en la fiesta fin de curso, en 1989. Como podéis imaginar, la persona que escribe el mensaje no para ahí y sigue acosando a Louise con numerosos mensajes que evidencian que conoce toda su vida y todos sus movimientos del pasado y, peor, los del presente.
A partir de este hecho, se inicia una carrera trepidante de acciones contadas por la propia Louise que nos lleva a conocer finalmente que pasó aquel fatídico día de fin de curso en que María Weston desapareció sin dejar rastro. En este camino la propia Louise nos irá presentando a otros personajes de su pasado, compañeros y compañeras de instituto que hoy llevan una vida más o menos normal, pero que de algún modo, la conocían a ella y conocían a María. Una historia de acoso escolar macabro en plena adolescencia, cuando las personalidades de los jóvenes que lo provocaron y los que lo sufrieron estaban por cuajar. Realmente, una historia que duele cuando la conoces, que no entiendes porque la lees desde tu perspectiva y aunque Louise te la cuenta en primera persona desde su punto de vista de acosadora, no acabas de entenderla. Por lo menos yo no he conseguido entender sus necesidades del momento y, por tanto, esa manera de actuar en el pasado. Me identifico más con la mujer del presente que quiere conocer y saber que consecuencias tuvieron sus actos y enfrentarse a ellos de frente.
Por ello, la novela cuenta con dos líneas temporales. Una la del pasado, en 1989 en la que conoceremos a los personajes cuando eran adolescentes en el instituto y los hechos que allí ocurrieron. Y la línea del presente, en la que Louise vive con su hijo Henry, divorciada de Sam, una antiguo compañero de instituto y es una diseñadora de interiores de éxito que no tiene otro remedio que ponerse a investigar quien la está acosando con mensajes cada vez más intimidantes. De vez en cuando, en cursiva aparecen una serie de textos en los que aparece una mujer cuya identidad desconocemos.
Una novela llena de intriga y de tensión y de esas en las que no sabes muy bien quien es quien, que te hace sospechar de todos los que aparecen porque tras las redes sociales cualquiera puede ser lo que quiera. Por no variar yo no he atinado a la hora de identificar a la persona o personas culpables con lo cual me he llevado una gran sorpresa con los giros que la historia va dando. Una novela muy entretenida, con un mensaje muy claro contra el acoso escolar y sus repercusiones en la vida de los que lo sufren y un aviso determinante sobre el riesgo que corremos cuando mostramos nuestra vida privada en la red.