En el compacto se congregan piezas que abarcan un periodo de casi medio siglo, desde 1967, año de Fetiches, hasta 2014, cuando Marco dio vida a Toccata in moto perpetuo y la paradójica Movilidad de la escultura. Esta última obra está dedicada al propio pianista madrileño y supone un llamativo y no poco humorístico corpus de breves piezas con títulos tan singulares como el de la que abre la suite, “La victoria de Samotracia sobrevuela la escalinata del Louvre”, en la que el compositor realiza sutiles citas de La Marsellesa.
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