En cuanto las vi me encantaron y me pareció un aperitivo graciosísimo. Además, creo que es un plato muy divertido para preparar con los peques de la casa ya que solo tenéis que montar las "piezas", no hay que cocinar ni usar el horno. Y por que ¿a qué niño no le gusta encontrarse una mariquita?
A mi de pequeña me encantaban y me ponía contentísima cuando encontraba una. La cogía en cuanto la veía, me la ponía en la mano, cerraba los ojos con fuerza para pedir un deseo y la soplaba bien fuerte para que se fuera volando y se cumpliera (y si no se iba no dejaba de soplar hasta conseguirlo jeje). Dicho así me han dado pena, pobres mariquitas, qué sufrimiento, pero es lo que tiene ser las portadoras de la buena suerte ¿no? Bueno, en teoría dan buena suerte solo con verlas, pero alguien me contó ese ritual y yo lo seguía a pies juntillas, por si acaso...
Ingredientes
- 4 tomatitos cherry
- 8 aceitunas negras sin hueso
- 8 tostadas pequeñas
- Rulo de queso de cabra o queso en crema
- Tinta de calamar o colorante alimentario negro
- Aceite de oliva virgen extra
- Unas ramitas de cebollito
Prepara las tostadas sobre la bandeja y pon un chorro de aceite de oliva virgen extra en cada una de ellas. Si vas a usar queso crema, este paso puedes saltártelo.Corta ocho rodajas finas del rulo de queso de cabra y cubre las tostadas o unta una buena capa de queso crema sobre ellas.
Por último coloca un par de ramitas de cebollino en cada aceituna como si fueran las antenas y ¡listo!