Mariquitas … ¿? … Dulce monacal … ¿? … gallego … ¿?

Por Juanatrujillo

Se avecina una explicación del nombre y de todos los detalles del título de la receta.

Nombre: Mariquitas … dudas al respecto
Tipo de receta: Dulce monacal de un convento de clausura… dudas al respecto
Origen: Gallego … dudas al respecto

Como se puede apreciar, dudo absolutamente de todo, no se si realmente se llaman Mariquitas, ya que yo sinceramente les llamaría, “magdalenas al anís“. Tampoco estoy segura de que sea un postre monacal, ni algo tradicional Gallego. He buceado a fondo por internet y no he encontrado nada al respecto. Si os preguntáis el motivo por el que esta así, podéis apostar a que es por mi cabezonería.

Tropecé esta mañana con un enorme librito que tenía olvidado en mi estantería, titulado “1000 recetas de repostería y pastelería de los conventos de clausura”, lo cierto es que no es un gran libro, la única muestra de cariño que ha recibido por parte del desconocido autor, fue cuando lo pasaron por el corrector ortográfico. Está lleno de errores, en esta receta en concreto, para 650 gramos harina me pide 7 litros y medio de aceite, también me pide 1 litro de leche que en el desarrollo de la receta no se utiliza y a mi juicio, le hace falta algún gasificante.

Pero me pareció gracioso (y a mí me enamora todo aquello que me saca una sonrisa), así que a pesar de sus errores me lo quedé, y a falta de referencias fiables, lo preparé como buenamente me dio mi conocimiento a entender. Aunque no se llamen mariquitas, aunque no sean monacales y aunque no sean gallegos, han quedado muy ricos, con un ligero sabor a anís, que le da ese toque de antiguo que tanto me gusta.

Ingredientes

350 gramos de harina, 250 gramos de azúcar, 250 ml de aceite, 250 ml de leche, 4 huevos, 1 chorro de licor de anís (a ser posible uno casero y estupendo que se haya hecho en casa), 1 cucharada rasa de bicarbonato.

Como preparar mariquitas

Separamos las yemas de las claras. Batimos la claras a punto de nieve. Batimos las yemas. En un bol grande mezclamos con movimientos suaves las dos cosas y vamos añadiendo, poco a poco, el resto de ingredientes.

Cuando tengamos una masa homogénea y sin grumos la repartimos en moldes, en mi caso escogí los de magdalenas, son los que tengo más a mano y me pareció lo más lógico.

Precalentamos el horno y cocemos a 170º grados, durante unos 20 o 25 minutos, hasta que estén doraditos y hayamos comprobado, con la ayuda de un palillo que están cocidos por dentro.

Sugerencias

Debemos asegurarnos que están bien frías antes de guardarlas en recipientes o bolsas, así evitaremos que se humedezcan.