Cuando tienes buenos ingredientes todo sale rodado, un poco de mimo, un poco de tiempo, chup, chup, chup, chup … y la cocina poco a poco se va impregnando del olor del guiso, va colándose por puertas y ventanas, y a semejanza de los ratones siguiendo al Flautista de Hamelin, van llegando a mi cocina hipnotizados por el maravilloso aroma de este guiso los estomaguillos hambrientos que despiertan a la vida…., la familia vamos!
Alfonso me mandó una botella de su increíble aceite, aceite de oliva virgen extra sin filtrar Los Omeya, realizado en la Coop. La Unión de Montilla SCA en Córdoba. Un aceite hecho con oliva recolectada a comienzos de la campaña, un aceite al máximo nivel de frescura y fragancia, de color verde intenso y reflejos dorados, aroma intenso a hierba recién cortada y a fruta madura. En boca es fresco, almendrado y ligeramente amargo, ha sido envasado sin filtrar para conservar todos sus aromas y sabores naturales primarios.Así fue verlo e ir directamente a mi sofrito, porque un marmitako sin un buen sofrito no es un marmitako, el resto fue sencillo, unas patatas compradas directamente del campo y un bonito fresco, poco más.
En su web www.aceitedelcampo.com podréis encontrar mas información sobre Les Omeya, el aceite que todo amante del sabory que cuida su salud debería probar.
Y aquí tenéis la receta:
INFREDIENTES para 4 personas:
4 Patatas nuevas grandes2 rodajas grandes y gruesas de bonito fresco (unos 750 g)La parte verde de dos puerros3 tomates maduros grandes rallados sin piel o una lata de medio kilo de tomate natural triturado1 cebolla tierna grande2 ajosPimienta negra molida1 hojita de laurelAceite LesOmeyasPimentón de la Vera Las HermanasUn poco de cayenaSalUnas ramitas de perejil fresco
PREPARACIÓN:
Lavar bien la parte verde de dos puerros y cortarlos menudito, proceder de igual forma con la cebolla y finalmente picar los ajos. Poner un chorro generoso de aceite Les Omeyes y pochar el puerro, la cebolla y los ajos, añadir una cucharadita de pimentón de la Vera ,un poquito de cayena y pimienta negra, a gusto de cada cual, en función de que te guste mas o menos picante y remover bien, añadir los tomates pelados y rallados, freír durante unos 10 minutos, mas o menos, hasta conseguir un rico sofrito. Lavar y pelar las patatas, cascar, o lo que es lo mismo cortar rompiéndolas para que suelten el almidón y nos quede una salsa mas rica, no hagáis los trozos muy pequeños, añadir las patatas cascadas, dar unas vueltas e incorporar agua hasta cubrirlas.
Cocer durante unos 20-25 minutos, hasta que la patata este blanda, probar el punto de sal, limpiar las rodajas de bonito, retirar la espina central y las que pudiera tener, también la piel con un cuchillo afilado, pegando el filo del cuchillo a la piel, de esta forma sacaréis el pescado sin desperdiciar nada, hecho esto cortar en trozos no muy pequeños, salpimentar el bonito y añadir los trozos al guiso , tapar la cazuela y apagar el fuego, retirar de los fogones, con el propio calor del guiso se cocinara el bonito, de lo contrario nos quedaría muy seco.
Para rematar picar un poco de perejil freso y decorar el plato.
Sugerencias para degustar este plato:
Una barra de pan de buena miga para mojar el caldito.
Una copa de buen Albariño o Chacolí fresquito.
Feliz fin de semana.