Hoy, sin embargo, le vamos a dar una vuelta de tuerca a la receta clásica y vamos a convertir este guiso marinero en un guiso de tierra porque en lugar de cocinarlo con bonito lo vamos a hacer con hongos. El resultado es un plato muy fino y exquisito. La idea no es mía, yo lo aprendí con el chef Aingeru Etxebarria, pero lo he hecho mío y ahora está en mi recetario como un plato demandado que sé que triunfa.
Es rico, sano y económico, ¿qué más se le puede pedir a un pato?
INGREDIENTES:
1 puerro
1 tomate
1 pimiento verde (no muy grande)
1/4 pimiento rojo
3 o 4 patatas (dependiendo del tamaño y el hambre de los comensales)
250 g de hongos
2 cucharadas de pulpa o salsa de pimiento choricero
Tomillo
1 chorrito de brandy
tomillo
Sal
Pimienta
MODO DE HACER:
Se rompen las patatas para que salga el almidón y se añaden a lo anterior rehogándolas, cuando estén se le añade al guiso el tomillo y el brandy, moviéndolo y dejándolo al fuego para que se consuma el alcohol.
Se pone en la cazuela la otra cebolla entera pelada y el tomate y se le agrega agua o caldo hasta cubrir.
Se deja hacer aproximadamente unos 30 minutos (hasta que las patatas estén hechas), en ese momento se saca la cebolla entera, el tomate y un poco de caldo y se pasa todo por la batidora. Esta mezcla se devuelve a la cazuela y se remueve.
Este plato se puede completar con unos huevos poché, uno o dos por comensal.