Marrullerías

Por Cogito

Que terminan conformando un panorama desolador. Tanto el presidente del gobierno como el líder de la oposición están envueltos en una situación incómoda, tensa, llena de acusaciones recíprocas, que podría encerrar algún delito en el ámbito académico.

Tanto la tesis doctoral de Pedro Sánchez como su llegada a la Moncloa parecen realizadas con premura y de modo atípico.

Por más que Casado se esfuerce en dar explicaciones, está claro que desde la nefanda Universidad le hicieron un regalo envenenado  y por su vanidad y afán de medrar lo aceptó.

Esto añadido a casos que se han saldado con dimisiones encubiertas.

Lo explicas todo  a alguien ajeno, distante y nunca dirá que estamos en un país serio.

Lo peor es que tiene pinta de seguir degradándose.