Mariano Rajoy está haciendo un especial esfuerzo para que la actualidad informativa del verano se mantenga así, centrada exclusivamente en la mencionada polémica con Gibraltar. Sobre todo ahora que Arenas y Álvarez Cascos se presentan hoy ante el juez y mañana, Cospedal. “El conflicto con el Peñón ha conseguido, por el momento, eclipsar parcialmente este asunto intrigante. Ni los periódicos de estos días abren ya con informaciones acerca de la supuesta contabilidad ilegal del PP, ni los columnistas opinan sobre los supuestos papeles del extesorero de los conservadores. Gibraltar lo ha copado todo –escribe Blanca Cambronero en Público.es–. Así quedó de manifiesto el pasado viernes durante el despacho que mantuvieron Rajoy y el rey en Mallorca. El presidente del Gobierno se esforzó por dar explicaciones acerca de las medidas que tomará contra el Peñón, pero no dijo ni una palabra acerca de la declaración de su mano derecha en el partido ante el juez que investiga la supuesta trama corrupta que afecta de lleno a su formación. Este intento por desviar la atención se percibe, incluso, en la zona en la que se sitúan todos los focos informativos desde hace ya varias semanas”.
Mientras tanto, las autoridades siguen aumentando los controles y disminuyendo las actividades de cara alas 30.000 personas que atraviesan la frontera diariamente, y la visita de la armada inglesa no parece que facilite las razones comercialesLa ONG “Ecologistas en Acción” pide que “no se use el medio ambiente” como justificación del conflicto y emplaza al Gobierno a que se fije en cuestiones más urgentes como prohibir la actividad de bunkering –el suministro de combustible libre de impuestos desde buques nodriza anclados en la Bahía de Algeciras–, negocio en el que el ministro Arias Cañete tiene especial interés como antiguo presidente de Petrolífera Ducar S.L. Y la Asociaciónde Pequeñas y Medianas Empresas (Apymel) de la Línea de La Concepción pide, desde hace días, que se ponga “punto y final” a toda la tensión porque el conflicto les está perjudicando “notablemente”. Y todos consideran que el conflicto es “una estrategia planificada” por parte del Gobierno español y, aunque opinan que el Ejecutivo gibraltareño no debería haber tirado los bloques de hormigón, creen que “desde el PP, habrían buscado cualquier otra excusa”.
El diario británico Financial Times abría el pasado sábado su portada con la fotografía del encuentro de Mariano Rajoy con el Rey Juan Carlos en Marivent y dedicaba uno de sus editoriales al conflicto de Gibraltar, un enfrentamiento que califica de posible cortina de humo. El periódico planteaba la sospecha de que el presidente español esté favoreciendo “la pantomima política” en torno al Peñón “para hacer desaparecer de las portadas de los periódicos el escándalo de la financiación de su partido, que amenaza su superviviencia”.