Martyrs (Pascal Laugier, 2008)

Por Especialistamike

Título original: Martyrs   Género: TerrorDuración: 98 minutos   País: FranciaDirección: Pascal Laugier   Guión: Pascal LaugierIntérpretes: Morjana Alaoui, Mylène Jampanoï, Catherine Bégin, Emilie MiskdjianMúsica:Alex CortésWillie Cortés
Francia. Una noche a comienzos de 1970. Lucie, una niña perdida hace un año, es descubierta andando por una carretera. Está en un estado catatónico y es incapaz de decir nada de lo que le ha sucedido. Los policías no tardarán en encontrar el lugar donde ha estado presa: un antiguo matadero... ¿Qué pasó en aquel lugar? ¿Cómo consiguió la chica escapar?

Y con Martyrs llegó la polémica... No en vano, y durante su estreno en el Festival de Cine de Sitges en 2008, la organización apostó a la salida de la sala donde se proyectaba una ambulancia, con el fin de atender a aquellos de los presentes que se sintieran indispuestos durante la proyección, teniendo en cuenta los precedentes que se habían vivido en Cannes y Toronto. Finalmente, y siempre según la organización, numerosos fueron los espectadores que abandonaron la sala durante la película e incluso uno de ellos vomitó debido a la crudeza de las imágenes. Y ahora llegan la preguntas de rigor: ¿Son ciertos los rumores? ¿Es para tanto? ¿O quizás es una maniobra de publicidad? Yo me decantaría por el marketing puro y duro...

Pero no por ello deja de ser una buena película, o dos, porque realmente Pascal Laugier ofrece dos partes perfectamente definidas: en la primera parte de Martyrs somos testigos de una historia de venganza jalonada de flashbacks. Lucie (Mylène Jampanoï) irrumpe violentamente en una casa cualquiera y siembra el caos y la destrucción. Descubrimos que durante su infancia había estado confinada en un sótano, siendo torturada sin motivo aparente y que, un día, consigue escapar. En el centro de acogida donde la internan hace amistad con Anna (Morjana Alaoui), a quien Lucie recurrirá en el futuro cuando sea consciente de la barbarie que ha cometido de forma. En esta primera parte hay que quitarse el sombrero ante un par de aspectos clave: uno es el frenesí y el ritmo que impregna esta parte de la narración, que desemboca en un torrente de adrenalina y violencia inusitada; y otro es el acierto del director de personificar el ruinoso estado mental de Lucie en un ente físico realmente grimoso y que infunde temor.

 

A partir de ahí y después de esa primera parte deudora del cine de terror más "convencional", se produce un giro espectacular y el film toma un nuevo rumbo, convirtiéndose en un viaje incómodo hacia otro tipo de terror, menos directo, mucho más metafísico, pero infinitamente más provocador y polémico. Podría analizar esta parte con mayor profundidad, pero aquí si que recomiendo encarecidamente ver la película y sentir uno mismo lo que sea que esta parte de la historia provoque en el espectador, hasta llegar a un giro final que, dependiendo de la persona, gustará o decepcionará a partes iguales. A mí, sinceramente, me gustó y mucho. La introducción de la búsqueda religiosa de la verdad mediante el dolor y el final, incómodo y de los que "joden", hizo que Martyrs pasase de curiosa cinta de terror a película incómoda, trascendente y transgresora, justo lo que Laugier buscaba con esta historia.



Poco más que decir que no se haya dicho ya. Tan sólo me queda mencionar que las dos actores protagonistas que llevan el peso de esta intensa historia se marcan dos actuaciones magistrales para quitarse el sombrero. Y si la veís, y os gusta la historia, el planteamiento y el debate que plantea, no tengaís miedo o vergüenza de confesarlo: nadie en su sano juicio os debería tachar jamás de ser un sádico/a o de enfermo, como he podido leer por ahí... Hay que ser valiente y atrevido, como Pascal Laugier ha sido, arriesgando con su radical y perturbadora forma de fábricar mártires, espectadores incluidos.