Este fin de semana los Indianapolis Colts celebrarán a lo grande: el Hall Of Fame verá el ingreso de dos de los más recientes pilares de esta franquicia a la inmortalidad: se trata del WR Marvin Harrison, quien además estará acompañado del head coach Tony Dungy en esta clase 2016. Aquí reseñamos la carrera del receptor número 88, quien dejó un sello de constancia y producción como pocos WRs en la historia de la NFL.
Egresado de la Universidad de Syracuse donde compartió un año con Donovan McNabb, Marvin Harrison llamó la atención de los scouts por su gran potencial. Luego de un trade que mandó al QB Jeff George a los Atlanta Falcons, los Colts pudieron seleccionar en la primera ronda del Draft de 1996 a Harrison.
Jim Harbaugh sería el QB encargado de enviarle los balones y Harrison no se hizo esperar para producir a nivel profesional: en su año de novato generó 64 recepciones para 836 yardas y 8 TD. Los Colts terminaron con marca de 9-7 pero fue suficiente para llegar a los Playoffs, donde cayeron ante los Pittsburgh Steelers en la ronda de comodín.
En 1997 sus números mejoraron ligeramente, con 73 recepciones y 866 yardas aunque sólo 6 TD, los Colts tuvieron una mala temporada con marca de 3-13 y marcó el fin de la era del head coach Lindy Infante y del mismo Jim Harbaugh en Indy.
1998 marcó el inicio de una nueva era para los Colts con la selección de Peyton Manning en el Draft. La franquicia estaba por entrar a una época dorada y Marvin Harrison sería uno de los principales beneficiados. Ahora bajo el mando de Jim Mora, la producción de Harrison, quien portaría el jersey número 88 del equipo, cayó levemente, algo esperado debido a la condición de novato de Peyton Manning.
Tras un año de experiencia para Manning, las cosas mejoraron para Marvin Harrison y por primera vez en su carrera superó las cien recepciones y las mil yardas, terminando la temporada 1999 con 115 recepciones, 1663 yardas y 12 TD, además conseguir su primer nombramiento All-Pro. Los Colts cayeron en Playoffs ante los Tennesee Titans en la ronda divisional, luego de haber ganado el Este de la Conferencia Americana con marca de 13-3.
Ya con Tony Dungy como head coach en 2002, nuevamente alcanzaron los Playoffs, representando por primera vez a la AFC Sur debido a la incursión de los Houston Texans en la NFL. Fueron humillados por los New York Jets 41-0 en el juego de Wildcard, pero Marvin Harrison llegó a su clímax como receptor, con 143 recepciones, 1722 yardas y 11 TD que le valieron su segunda designación como All-Pro, Esta sería la última campaña en que Harrison superaría las 100 recepciones.
En 2003 los Colts nuevamente llegaron a Playoffs y en la Final de Conferencia inició la gran rivalidad entre Manning y Brady con el triunfo de New England para avanzar al Super Bowl. Estos fueron los mejores Playoffs para Harrison con 16 recepciones, 250 yardas y 2 TD.
Peyton Manning tuvo la mejor temporada para un QB en 2004 registrando 49 TD; Marvin Harrison aportó a la hazaña con 15 TD, igualando su marca más alta desde 2001. Lamentablemente para ellos, la temporada nuevamente terminó a manos de los campeones defensores, New England, en la Ronda Divisional.
2006 sería el año del exorcismo para los Colts: Marvin Harrison aportó 95 recepciones, 1366 yardas y 12 TD para que Indianapolis consiguiera un lugar en la Postemporada, así como la tercera y última designación de Harrison como jugador All-Pro. En una marcha cuyo clímax fue la histórica remontada ante los New England Patriots, Marvin Harrison, Peyton Manning y los Colts por fin pudieron levantar el trofeo Vince Lombardi en la edicion XLI del Super Bowl.
Harrison anunció su retiro al término de la campaña 2008, y puso su nombre rumbo al Hall of Fame, con la monstruosa cifra de recepciones, 1,102 en apenas 13 temporadas, solamente detrás de Jerry Rice y sus 1,549 en 20 temporadas. Harrison terminó además con 14580 yardas y 128 TD.
Desafortunadamente Marvin Harrison no sumó otro título en su constante presencia en Postemporada, pero para quienes lo vimos jugar sin duda es uno de los mejores de la historia. Ser el arma favorita de Peyton Manning durante toda una década no es poca cosa y Marvin formó parte de una ofensiva de época. Su lugar entre los inmortales es más que merecido y el Lucas Oil Stadium debería ser recordado como la casa que Peyton Manning y Marvin Harrison construyeron.