El Club de los Viernes ha decidido iniciar una campaña en defensa de las libertades civiles conculcadas por las declaraciones de "Espacios Libres de Apartheid Israelí".
Dicha campaña se iniciará con una recogida estatal de firmas pidiendo la derogación dichos "Espacios" y tendrá su punto álgido el día 23 de junio, en la ciudad de Gijón, con la organización de una c onferencia titulada "Israel: La democracia asediada".
Conferencia impartida por representantes de ACOM (Acción y Comunicación sobre Oriente Medio), organización que ha presentado más de 40 demandas contra instituciones que han limitado libertades constitucionales con estas declaraciones de "espacios libres".
Con la aprobación de la propuesta compartida de PSOE, Xixón Sí Puede (Podemos) e IU, y la vergonzosa abstención de PP, Foro y Ciudadanos, consistente en declarar la ciudad de Gijón "Espacio Libre de Apartheid Israelí", ya son cuatro los ayuntamientos asturianos que han secundado dicha iniciativa (Gijón, Langreo, Castrillón y Corvera), que cuenta ya con el apoyo de 40 Ayuntamientos en toda España. Lo curioso es que Gijón -gobernado por Foro Asturias- es el único de esos 40 ayuntamientos no gobernado por la izquierda.
Declaración esta, que básicamente consiste en apoyar las acciones promovidas por el movimiento BDS (Boicot, Desinversiones y Sanciones contra la colonización, el apartheid y la ocupación israelí).
De hecho, el acuerdo municipal de Gijón (16 de enero de 2016) insta al ayuntamiento a:
"Fomentar la cooperación con el movimiento BSD, articulado a nivel estatal por la Red Solidaria Contra la Ocupación de Palestina, y a nivel autonómico y local por el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe"Pero, ¿qué se esconde realmente tras el movimiento BSD? Pues en pocas palabras, un movimiento con una ideología basada en la i mposición de un pensamiento totalitario y antidemocrático cuyas armas son la presión y el boicot.
Un movimiento basado en la coacción al que piense diferente o no acepte su visión sobre lo que ha venido en denominarse el conflicto Arabe-Israelí. Un movimiento que pretende cercenar las libertades civiles, mediante el uso de campañas de intimidación y acoso a nivel mediático, empresarial, económico y político, pero sobretodo a nivel cultural.
Así, según el BSD, "el gobierno sionista desarrolla una campaña de enmascaramiento de su comportamiento racista y genocida a través de eventos culturales y deportivos", por lo que todo acto directa o indirectamente relacionado con Israel (sea o no de carácter gubernamental) debe de ser boicoteado. Todo acto israelí, que no sea explícitamente condenatorio hacía sí mismos, será considerado por el BSD como una "colaboración con la propaganda normalizadora sionista".
Mediante la utilización de un lenguaje imbuido de racismo, pretenden demonizar toda libre manifestación cultural o empresarial que tenga cualquier asomo de presencia Israelí o judía:
- Boicot a la Sala Caracol de Madrid para que cancelase el concierto del músico Idan Raichel
- Boicot al espectáculo del Circo del Sol "SAMA SAMA" dado el origen israelí del mismo
- Denuncia de la participación de Israel en Eurovisión, de las presiones para la retirada de películas israelíes en el festival de cine de San Sebastián ( bajo el pretexto de que "Ignorar el cine palestino y apoyar el cine israelí es una opción política, no cultural")
- Movilizaciones y protestas contra la presencia en Festival Rototom del cantante estadounidense Matisyahu
- Campaña contra el festival de música Primavera Sound por incluir a artistas invitados de tres bandas israelíes
- Boicot a las actuaciones en España del grupo musical Mayumana por ser "un instrumento de la propaganda israelí, que se presenta como símbolo del cosmopolitismo y la diversidad de Israel"
- Declaración por parte del BSD de Joaquín Sabina como "persona non grata por su complicidad directa y repetida en la normalización del régimen de apartheid y ocupación israelí" por haberse atrevido a saltarse la prohibición establecida por el BSD de dar conciertos en Israel...
Y así, un largo etcétera.
Gijón, tuvo también su ración de coacción y violencia al tener que intervenir la policía para garantizar el acceso del público al Teatro Jovellanos, asediado por manifestantes convocados por el Comité de Solidaridad con la Causa Árabe, con motivo de la actuación de la compañía de danza israelí Sheketak.
Y es que, según la visión totalitaria del BSD, "la cultura no es inocua, no aceptamos la imagen del Israel moderno"
Pero como decíamos antes, la campaña se extiende también al ámbito empresarial y académico. Dentro de las actuaciones del BSD, esas a las que los espacios libres deberán prestar cooperación, está la "Campaña Palestina para el Boicot Académico a Israel" que insta directamente al boicot de todo proyecto académico israelí, ya sean conferencias, proyectos de divulgación, de intercambio, de investigación, I+D+I, etc...
En cuanto a la campaña de boicot empresarial, valga como ejemplo que si en algún momento usted optase por contratar con una empresa que usase máquinas de la marca Caterpillar, según el BSD, sería usted un malvado "colaboracionista de la represión de origen sionista". Y no porque dicha marca sea Israelí, que no lo es, sino porque los bulldozers Caterpillar son utilizados, entre otros, por el Estado israelí.
Desde el Club de los Viernes, hemos defendido siempre que no queremos una sociedad dirigida desde el poder, y mucho menos una sociedad instrumentalizada desde grupos de coacción antidemocráticos. Así que cuando alguien le hable de la inocencia de declarar un determinado espacio "Libre del apartheid Israelí", piense ¿De verdad quiere usted vivir en un régimen que le imponga coactivamente el tipo de cultura, conocimientos o empresas a los que podemos acceder para ser considerados buenos ciudadanos? ¿Es eso lo que quiere?