Lo curioso es que mis admiradores en Facebook están cayendo como moscas. ¡Vaya, hombre! Si ahora resulta que estoy a favor del tabaco. Pues sí, estoy a favor de que cada cual haga lo que quiera y, ahora sin ironía, estoy a favor de que el que no quiera fumar que no fume. Hay veces que hay que dejar la ironía en casa porque la gente no está demasiado acostumbrada o algo parecido.
En fin, amigos míos, haced lo que queráis y, sobre todo, dejad que también los demás hagan lo que quieran.
Es lo más sano.
PS: ¿a que esta vez la foto es más agradable?
Martín Cid http://www.martincid.com