Más sobre el Haemophilus influenza tipo b (Hib)

Por Stornel
El Hib es uno de los gérmenes causantes de infección bacteriana grave en niños pequeños ya que puede causar meningitis, sepsis (infección de la sangre), neumonía, artritis, epiglotitis, otitis e infecciones de otras partes del cuerpo causando la muerte o lesiones permanentes. La enfermedad por Hib es más común en niños de tres meses a tres años de edad. Es poco usual en niños mayores de cinco años de edad y se transmite a través del contacto con el moco  o secreciones de la nariz y de la garganta de una persona infectada.
Los niños tienen los síntomas clásicos de una infección grave con mal aspecto general, fiebre, vómitos, apatía, y otros síntomas dependiendo de la parte del cuerpo afectada y éstos aparecen entre de 2 a 4 días después del contagio (menos de 10 días). Una persona enferma  puede contagiar mientras este organismo permanezca en su nariz y su garganta. Por ese motivo, es variable. Si recibe tratamiento antibiótico puede trasmitir la enfermedad hasta 1-2 días después de haberlo iniciado. A los niños que han estado en contacto cercano (guardería) con uno enfermo se les puede administrar un antibiótico preventivo y no se hace en el contacto casual (niños de otras aulas del colegio aunque se vean en el patio o el comedor).
Para prevenir la trasmisión de la enfermedad por Hib las vacunas han resultado extraordinariamente efectivas y en algunos países europeos esta infección se ha erradicado. En España la vacuna está incluida en todos los calendarios vacunales y por esta razón la infección por Hib prácticamente ha desaparecido.