El masaje infantil es una muy buena vía de comunicación con tu bebé, ya que engloba el tacto, la voz y la mirada, y es ventajoso tanto para los hijos como para los padres, no sólo a nivel fisiológico, sino también en cuanto al aspecto emocional.
Este rato tan especial supone un equilibrio emocional muy importante para el niño y vale la pena poder dedicar unos minutos de nuestro tiempo a realizar algo tan fácil y gratificante, que potencia este vínculo inicial madre/padre/bebé. Animo a los padres a practicarlo, puesto que supone un espacio propio y una interacción especial, que les ayude a desarrollar una mejor relación, más íntima y que gane en autoconfianza. (Para más información “Asociación Española de Masaje Infantil”)