Como me habia tomado una botella de vino con la comida me fui a andar un rato por la desolada ciudad, necesitaba de estirar las pierna y de exorcizar los vapores del alcohol, cuando voy pasando por los bajos de un edificio unas lucecitas de colores empiezan a bailar ante mis ojos y como un iman me conducen hacia lo que yo pense que era un bar de copas, curioso fui a ver y una muchacha china se encontraba fuera del local hablando por el movil, cuelga rapidamente y muy habilmente me engancha, dijo siga señol , aparte con mi mano derecha la cortinilla de cuentas y penetre a una estancia iluminada entre azul y rojo, me llamo la atención que olia a limpio, todo el recinto estaba perfectamente ordenado y amoblado con solo lo estrictamente necesario, en ese momento ponen a funcionar el equipo estereo y una musica suave, sensual y relajante invade el lugar, una chinita de solo tres que habian toma posesión de mi persona, ella menudita vestida de jean, t-shirt y zapatillas se me acerca y me ofrece un masaje invitandome a penetrar a un cuarto lateral, me entrega un paquetito verde que con mucha curiosidad deshago y resulto una prenda interior masculina que yo me deberia poner para ocultar mis partes pudicas, colgue mi ropa del perchero y ella a continuación me hizo reclinar en una camilla que se encontraba allí para hacer el masaje, la muchacha me explico que habia dos maneras distintas, a modo de prueba me masajeo fuerte y otra como acariciando, me decidi por la segunda, ella fue clara y me dijo NO SEX, solo masaje , Ok le dije, simultaneamente preparo la tina de madera que habia al lado junto a la pared con abundante espuma y petalos de rosa, me senti afortunado, parecia como un pascha, me aplico abundante aceite y froto mi cuerpo de una manera especial sin erotizarme como mimando mi cuerpo, me hizo acostar boca abajo, empezo por la espalda, continuo por las piernas no olvido de frotarme con sus delicadas manitas ni mis brazos ni la cabeza. Las partes mas sensitivas como los glúteos, las entrepiernas y el pecho los masajeo con mucho cuidado con movimientos suaves usando toda la mano, me froto el estomago con movimientos circulares, despues de un rato me invita a pasar a la tina de madera y lo hace todo con tal suavidad que quedo gratamente sorprendido, el perfume que emana del agua tibia me relajan completamente, que dedicación, para terminar me seca con una toalla, un servicio excelente, no se si volveria a hacerlo pero bien valio la pena.