El escote y pecho es una de las partes más olvidadas de nuestra anatomía, carece de músculos y es pobre en glándulas sebáceas. Y es una de las que más cuidados necesita y donde antes se nota el paso de los años.
Además de hidratar la zona todos los días, utiliza una vez a la semana la siguiente mascarilla, sólo necesitas una yema de huevo y una cucharadita de miel, si eres constante notaras los resultados en poco tiempo.
La proteína que contiene el huevo ayuda a incrementar la elasticidad de la piel, dejándola suave y tersa. Además la yema de huevo contiene gran cantidad de vitaminas, como la Vitamina A, D, E y K y minerales.
Por su parte, la miel es uno de los productos naturales más utilizados en la cosmética e ingrediente de muchas mascarillas caseras. Contiene vitaminas y enzimas que le convierten esencial para el cuidado de nuestra piel. Ayuda a regenerar, hidrata y nutre. La miel, gracias a las enzimas que contiene, ejerce un suave efecto exfoliante, dejándola limpia y eliminando las células muertas con la suavidad que la delicada piel del escote y de pecho necesitan.
Un lujo de mascarilla, con ingredientes que seguro que están en tu cocina, para cuidar tan delicada zona del cuerpo de la mujer como es el escote y el pecho.
Cómo hacer la Mascarilla Casera para el Escote y el Pecho:
- Mezcla la yema de un huevo con la cucharadita de miel hasta conseguir una pasta homogénea.
- Aplica la mascarilla en el escote y los pechos evitando los pezones, deja actuar 20 minutos.
- Retira la mascarilla con agua tibia, y si eres capaz de soportarlo, termina con agua fría para estimular la circulación.