La Fundación Affinity ha publicado recientemente un estudio muy revelador acerca de la relación que mantenemos las personas con las mascotas. Pese a que tan solo un 43% de los españoles convivimos con una, el 76% manifiesta abiertamente que le gustaría convivir con ellas.
A pesar de lo que pudiera parecer, el económico no es el motivo fundamental por el que más gente no tiene un perro, un gato o cualquier otra raza de mascota. La falta de espacio y de tiempo son los factores principales por los que el porcentaje de mascotas en nuestras casas no es mayor del que es. Sin embargo, la creencia de que una mascota requiere de mucho espacio y tiempo no es del todo cierta. Muchas son bastante independientes y no necesitan que se esté encima de ellas todo el tiempo.
Lo que sí deja bien claro este estudio es el vinculo afectivo que existe entre animal y persona. De hecho, el 31% de la gente que vive con una mascota afirma que la antepone a las amistades y que el vínculo emocional que le une a ella es superior que el que le une a su círculo más cercano de amistades. Llama la atención, ¿verdad?
Siguiendo con el tema sentimental, el estudio encuadra a todos los dueños dentro de una de las dos siguientes categorías: los de tipo emocional y los de carácter más pragmático. Los primeros suponen el 75% del total y son todos aquellos que afirman que el motivo por el que tienen un animal en casa es porque les aporta bienestar y apoyo, sobre todo en los momentos de dificultad. Los segundos, en cambio, aunque también reconocen las ventajas de la convivencia con un animal, su interés es más de tipo práctico que emocional. Un ejemplo de estos serían todos aquellos que tienen un perro solo por motivos de seguridad.
Por sexos, parece ser que las mujeres tienen una mayor afinidad con sus mascotas que los hombres. Pero más especial aún es la relación que mantienen los niños. Más del 60% consideran a su mascota su mejor compañero de juegos. Y por último, si hablamos de regiones, Canarias es la que presenta un mayor índice de animales de compañía por habitante. Más allá de que el nombre de Canarias tenga su origen en la palabra “can”, el clima y las costumbres de hacer vida en la calle seguro que también influyen en que sean estas islas las que lideren este apartado del ranking.