Y después de esta torta y estas galletitas, se cruzaron en mi camino las goraibah, o galletitas de manteca de medio oriente.
Esta versión, la de la casa de Majid Ali, tiene limón, cardamomo, agua de rosas y pistachos.
Por supuesto que nombrarla es mucho más difícil que comerlas! Y que hacerlas, ya que estamos.
Porque para ser una delicadeza y rareza como esta, son super simples.
Y no requieren de ningún instrumento extra o raro. Siempre que pienso en hacer mamul, me frena no tener el molde. Baklava, no tener los ingredientes a mano, y así...
Perfumadas, ricas, pero con gustos que no invaden ni se invaden entre sí.
Son tan mantecosas como cualquier rica masita, pero con sabores que no esperas cuando las comes.
Un hallazgo que se queda en mi recetario por mucho tiempo!
Hay una receta!