Matar a Leonardo da Vinci

Publicado el 10 julio 2015 por Nievesvillalon @mundosdelectura

Christian Gálvez (Madrid, 1980) estudió Magisterio y Filología inglesa. Actualmente es uno de los rostros de Mediaset España donde conduce con éxito el concurso cultural Pasapalabra desde hace siete años. Asimismo es el director de la productora 47 Ronin, S.L., empresa destinada a potenciar el talento de jóvenes promesas, y socio de Soul&Share, productora que desarrolla contenidos audiovisuales. Desde 2009 compagina su trabajo en televisión con su investigación sobre Leonardo da Vinci y vive a caballo entre Madrid y la Toscana. Sus conferencias sobre Leonardo son cada vez más demandadas.

«Meser Leonardo da Vinci tiene un concepto tan herético que no se atiene a ninguna religión y estima más ser filósofo que cristiano. Por lo tanto, la resolución es firme y clara: debemos matar a Leonardo da Vinci».
Europa, siglo XVI. Mientras España, Francia e Inglaterra ultiman su unificación, los Estados italianos se ven envueltos en conflictos permanentes por culpa de la religión, el poder y el ansia de expansión territorial. Lo único que les une es el renacimiento cultural de las artes. En la Florencia de los Médici, epicentro de este despliegue artístico, una mano anónima acusa de sodomía a un joven y prometedor Leonardo da Vinci. Durante dos meses será interrogado y torturado hasta que la falta de pruebas lo ponga en libertad. Con la reputación dañada, Leonardo partirá hacia nuevos horizontes para demostrar su talento y apaciguar las secuelas psicológicas provocadas en prisión.
¿Quién lo acusó? ¿Con qué motivo? Mientras se debate entre evasión o venganza Leonardo descubrirá que no todo es lo que parece cuando se trata de alcanzar el éxito.
Haciendo gala de un estilo documental exhaustivo y exquisito, fruto de varios años de investigación y de viajes a los escenarios más representativos de la vida del genio, Christian Gálvez construye un thriller histórico, una novela de aventuras en la que se dan cita arte, venganza y pasión. Una obra que atrapa desde las primeras páginas y que cambiará la opinión que hasta ahora se tiene del genio florentino.

Matar a Leonardo da Vinci es un libro narrado en tercera persona, pero con su foco apuntando directamente a la figura de Leonardo da Vinci. Aunque nos encontramos bastantes personajes coetáneos a este genio, está clarísimo desde el principio que la obra se va a centrar en él.
Como os comentaba antes, hay muchísimos personajes además de Leonardo da Vinci. Nuestro protagonista se relacionó con Miguel Ángel, Botticelli, con los Médici... y todos estos personajes aparecen debidamente reflejados en la novela. Se nota, poro otro lado, que Christian Gálvez ha llevado a cabo una gran labor de documentación para poder reflejar bien a estos personajes, dotándoles de una personalidad que parece acorde con la época y con sus creaciones, pinturas, y esculturas (y mucho más). 
Aunque casi nunca hablo de la estructura de los capítulos ni de su forma, creo que en esta novela es influyente. Aunque se exceden un poco en extensión (para lo que estoy yo acostumbrada), es importante que tengan esta extensión. Los capítulos están delimitados en el tiempo, y narran diversas situaciones de nuestro protagonista. Por eso algunos son más largos (y no por ello tediosos de leer), y otros tienen menos extensión.

Lo primero que tengo que decir es que me ha fascinado mucho la faceta que le da a Leonardo da Vinci Christian Gálvez. No me lo imaginaba así cuando lo estudié en Historia del Arte, y me ha gustado profundizar en su persona, y no tanto en su obra.
Otra cosa que me ha gustado mucho es que dentro del libro se incluyan fotografías de gran calidad de obras de da Vinci, Botticelli y otros artistas que aparecen en la novela. Me parece un gran detalle y me gusta ese cuidado que ha tenido la editorial de incluirlo. Se nota que el autor ha hecho gran esfuerzo, y no solo eso, sino que ha puesto todo su empeño en que nos gustara la obra.
¿Por qué le pongo un 3/5 si todo lo que os he contado es bueno? Como sabéis, la novela histórica no es mi punto fuerte, y aunque esta novela se acerca más al thriller o la aventura que a la histórica, "peca", por así decirlo, de muchos detalles históricos, muchos nombres que al principio me perdía, y en fin... son elementos a los que no estoy acostumbrada y no me han disgustado, pero me han hecho refrenar un poco su lectura.