Maternidad subrogada en la India

Por Pequelia @pequelia

La imposibilidad de tener hijos es una realidad que cuesta asumir. Ya no sólo nos referimos a las parejas que tienen algún problema que les impide la gestación, sino también a las personas solteras que quieren tener un hijo y no encuentran la persona adecuada. En este sentido las mujeres lo tienen mucho más sencillo, pero ¿qué hay de los hombres solteros que buscan ser padres a toda costa?

La maternidad subrogada (o vientres de aquiler) parecen la alternativa más alentadora si lo que quieres ser es, además de padre, progenitor. En España esta alternativa no termina de cuajar, al establecer la ley que la madre natural es la que da a luz al bebé. Es decir, que para contemplar en nuestro país esta posibilidad, lo primero que se tendría que hacer es cambiar la ley. Es por ello que las personas que se encuentran en esta situación y si su estado financiero se lo permite, ponen rumbo a otros países donde esta práctica si está legalizada.

EE.UU. es uno de los países donde esta práctica esta legalizada y ampliamente extendida, ya que además de los propios estadounidenses, son muchas las personas que viajan hasta allí para someterse a este proceso y encontrar un vientre de alquiler. La realidad, como ya apuntábamos en nuestro artículo sobre los vientres de alquiler, es que el tratamiento es muy costoso (puede llegar a alcanzar los 100.000$) y los requisitos son muy estrictos. Hacen falta decenas de partes médicos, decenas de revisiones médicas a las partes implicadas, de contratos, letra pequeña… Por ello muchas de las personas encuentran la solución a su problema en países como la India.

Las exigencias legales no son tantas (aunque tampoco las garantías), el papeleo burocrático tampoco, el coste es poco más de la mitad (comparado con EE.UU.) y sobre todo las experiencias de personas que ya lo han logrado son, cuanto menos, recorfontantes, aunque no están exentas de problemas y riesgos. Los propios especialistas que siguen tu caso son los encargados de buscarte los vientres subrogados. Se realizan los tratamientos clínicos pertinentes y luego se lleva un exhaustivo control médico para saber si el embrión ha cuajado y de ser así, para llevar un absoluto control del feto.

Al fín y al cabo lo que supone esto en países como la India es cierto nivel de ingresos para las personas que se prestan a ofrecer estos servicios. Las madres de aquiler suelen cobrar entre 5.000 y 7.000 euros, lo que supone 10 años de salario para la gente que trabaja allí en el campo. Tal es la oferta de vientres de alquiler que hasta te pueden plantear la posibilidad de fecundar a dos mujeres distintas para ampliar el número de posibilidades de que el tratamiento sea exitoso.

Todo este proceso conlleva unas serie de consideraciones éticas y morales que toda legislación debe contemplar y sobre todo una serie de derechos para las partes implicadas (como ya comentábamos en Madres sustitutas en Francia) que siempre deben prevalecer.

Si todo finalmente va bien, lo único que nos quedará será traernos a casa a nuestro hijo. Acudir a la embajada española en la India será el último trámite que tengamos que hacer para traernos a nuestro bebé a España, aportando: partida de nacimiento emitida por el Registro Civil (MCD) con apostilla, contrato de subrogación, carta de renuncia de la madre subrogada, certificado del medico que ha realizado el proceso de FIV, certificado del nacimiento emitido por el hospital donde nació el bebé , carta de cómo se realizo el proceso embriológico y transferencia de embriones , pasaportes con su visado, de los padres españoles, acta notarial en ingles y compulsada, que certifique el matrimonio de la madre subrogada en caso de estar casada y documentos que acrediten la identidad de la madre subrogada y de su marido, el día que estos sean entrevistados, es valido el carné de votar de curso legal en India.

Pero no todo es un camino de rosas, hay que tener mucho cuidado y saber a quién se confía el proceso para no ser víctima de una estafa y gastarse miles de euros para nueve meses después venirse con las manos vacías.

Además la falta de legislación en la India al respecto y la ilegalidad que conlleva para algunos países, supone en muchos casos encontrase en un limbo legal, a la hora de traerse al pequeño a casa. En la India se contemplaría como padres de estos niños a quien alquiló el vientre y en los países donde no está legalizada esta práctica, la ley establece que la madre es la que da a luz. Por lo tanto resulta un poco complicado darle una nacionalidad al bebé. Aún así, son muchos los que ya lo han conseguido o están casi a punto. Desde aquí nuestra enhorabuena.

Más información: subrogacyindia.blogspot.com
Foto: Julija Felajn