Cuando te reproduces, si mantienes tus funciones cerebrales intactas, también te parece una chorrada pero es increíble la cantidad de energía que quemas con este tema.
El pelo de los niños es un tema en sí mismo incluso antes de existir. Es una cuestión de fe, es un misterio de la naturaleza, un secreto del universo, antes de existir ya existe.
- ¿Qué tal llevas el embarazo?- Bien, bien...sin problemas...lo único que tengo mucho ardor de estómago. - Uy...eso es que al bebe le está creciendo el pelo...ya verás la pelambrera que tiene. - ¿De qué hablas? - Que el ardor te da porque el niño tiene mucho pelo…- …ya no tengo ardor pero me está dando un asco…
Cuando nace el pequeño gollum, el pelo del niño también es un tema de mucha actualidad en la clínica: ¡¡halaaa qué de pelo!!! ¡¡ Pero bueno!!...¿de dónde ha sacado tanto pelo si el padre es calvo?..Bueno...pero si es pelón...que mono...pobre...será calvo como el padre. O como con mi sobrino Littlered...¡¡PERO COMO PUEDE SER TAN PELIRROJO!!!
Los bebés nacen con un pelo asquerosillo, ya sé que a las madres amantísimas les parece que no, que esa pelusilla grasienta es ideal...pero es asquerosillo. Te llevas al bebe a casa y como te has comprado un cepillo absurdo y un bote de colonia Nenuco que te va a durar hasta que el niño tenga 15 años, cuando lo sacas del baño le peinas..Y le haces raya...con dos cojones.
En estas primeras etapas, siempre hay alguien en tu entorno que viene y te dice: ¿le raparás no?? Porque como no le rapes...luego no le sale el pelo fuerte. Creencia esta que tiene el mismo fundamento que lo de que el pelo da ardor o de que si miras fijamente a alguien que duerme se despierta...es decir, ninguna.
Puedes optar por raparle y dejarle como una bolita de billar y disfrutar luego de cómo le va saliendo una pelusilla exactamente igual que la anterior pero directamente indomable. O no raparle y asistir al espectáculo espeluznante de ver cómo se va quedando sin pelo en cada trozo de cabeza que roza el colchón mientras duerme, es decir se queda sin pelo en todos lados menos en la coronilla donde el mechón que tenía al nacer crece hasta convertirse en un Anasagasti.
Ambas opciones son malas y ambas opciones van a hacer que tu bebe esté horroroso durante la etapa de los 5 a los 8 meses, pero a ti te va a dar igual...estás lleno de amor maternal y te parece el más guapo del mundo. Eso sí, cuando después veas fotos de esa edad pensarás: madre mía que coco era….
A partir del año empieza el descojone capilar. Las forofas de la peluquería llenan la cabeza de sus niñas de lazos, diademas con flores, pájaros, gomas conjuntadas con la falda, con los zapatos o con el abriguito. Hacen a sus niñas coletas, trenzas, recogidos, dos coletas, dos trenzas, un kiki a un lado, detrás...el pelo suelto...toda una sinfonía de opciones capilares. Si las forofas de la peluquería tienen niños suelen hacer dos cosas: o bien los peinan como si sus churumbeles fueran a ir a un consejo de administración de un banco de inversiones o les dejan crecer el pelo como querubines complicando muchísimo la identificación del churumbel como niño o como niña.
Las madres pasotas del tema pelos, hacemos lo que podemos, que suele ser poco. Intentamos que nuestras hijas no coman pelo y que se les vean los ojos, para lo cual muchas veces hay que batallar con ellas para que se hagan una coleta, se pongan una diadema o una horquilla. Desde aquí lo digo, envidio a esa gente que puede llevar a sus hijas perfectamente peinadas todo el día. Para mí, es una batalla perdida. Creo que pelearme con M para que se peine me ha hecho encanecer muchísimo.
Los churumbeles según crecen, van tomando el control de su pelo. Por observaciones de mi entorno compruebo que un 90 % de las niñas quieren llevar el pelo largo, cuanto más largo mejor y un 90 % de los niños se peinan con cresta. De el 10 % restante hay un 7 % que sigue sometido a la dictadura de su madre ya sea con lazos de colores o gomina y al 3 % restante se la pela completamente el tema pelo. Yo tengo una de el pelo cuanto más largo mejor y otra que no sabe ni que tiene pelo.
Por supuesto a toda esta problemática capilar los padres son bastante ajenos. El peinado de los churumbeles y más sin son niñas es un terreno idóneo para la frase mágica: a mi es que esto se me da fatal...mejor hazlo tú. He llegado a ver padres que llevaban a sus niñas como electroduendes a la guardería y al llegar a la puerta pedían a la profesora que les hiciera la coleta.
Los padres suelen pasar bastante del tema pelos hasta que un día, la armonía familiar se ve quebrada con la siguiente frase: Menganito tiene piojos...baja a comprar una liendrera.
Entonces el padre suele decidir que sus hijos llevan el pelo muy largo...y que lo mejor es raparlos a todos, solución esta que tiene la misma eficacia que intentar amaestrar a los piojos pero que el padre ofrece para librarse de las horas interminables que va a pasar en un cuarto de baño atestado de vapor de agua peleando con sus fieras que no pararán de quejarse: ¡¡me estás dando tirones!!!! ¡¡Me haces daño!!!! Déjameeeee en pazzzz…
De todos modos, lo que me preocupa a mi no son los piojos o que M no quiera peinarse. Lo que me preocupa es que observo a las adolescentes por la calle y todas llevan el pelo largo y lánguido...todas van con pinta de darme una guitarra que canto en bolas, veo una moda de pelos largos que me horrorizan y lo que es peor una tendencia que dice si llevas el pelo largo eres guapa..¿Qué exagero?..Para nada.
- Mami...tengo una profesora nueva este año. - Muy bien…y ¿qué tal?- Bien...se llama como tú...pero es guapa. - …vaya… - Mamá...es guapísima…- No me lo digas…lleva el pelo largo…- …si…larguísimo...te lo he dicho mil veces...el pelo largo es de guapas…
Sobre el mismo tema pero en adultos: Ellos y vellos y Ellas y Bellas.