Ingredientes:
Dos zanahorias grandes
Un diente de ajo
Un generoso chorro de aceite de oliva
Sal, pimienta y especias
Preparación:
Hierve o (mejor aún) cocina las zanahorias al vapor hasta que estén tiernas. Una vez que ya estén a punto, colócalas en el vaso de la batidora con el diente de ajo picado.
Procesa las zanahorias con el ajo a medida que vas añadiendo en forma de hilo el aceite de oliva. Una vez que tome una consistencia similar a la de una mayonesa (no hay problemas si la quieres más espesa), deja enfriar y condimenta con sal, pimienta y algunas especias de tu gusto. El cebollín, por ejemplo, le sienta de maravillas.
No sólo que no incorporarás ningún elemento dañino a tu dieta anticolesterol, sino que además te ayudarán las fibras de la zanahoria y las propiedades del ajo y el aceite de oliva. Perfecta para acompañar todo tipo de comidas.