McLaren reacciona ante el fichaje de Laurent Mekies por parte de Ferrari

McLaren se mostró en desacuerdo con Ferrari y el organismo rector de la Fórmula 1 el jueves después de que el equipo de Maranello contrató a un alto funcionario técnico de la FIA en contra de un acuerdo reciente entre equipos.
La Federación Internacional del Automóvil y Ferrari anunciaron el miércoles que Laurent Mekies, subdirector de carreras de la FIA y jefe de seguridad, se mudará a Maranello en septiembre.
Mekies es el segundo oficial de alto rango de la FIA en unirse a un equipo durante el año pasado, con Marcin Budkowski trasladándose a Renault después de renunciar en septiembre como jefe técnico.
Ese movimiento provocó las críticas de los equipos rivales en el momento en que dijo que era inaceptable que alguien con acceso a información secreta comenzara a trabajar con un competidor luego de una pausa tan breve.
"Estamos muy descontentos con la FIA por perder otro empleado clave de un equipo de carreras", dijo el director de carreras de McLaren, Eric Boullier, al sitio web motorsport.com el jueves.
"Especialmente después de que todos los equipos de la última reunión del Grupo de Estrategia convinieron en que ningún equipo de la FIA empleará a los empleados clave de la FIA dentro de los 12 meses posteriores a su salida de la FIA. Ferrari fue en contra del acuerdo del caballero, y la FIA no lo ha aplicado ".
McLaren, cuyo director ejecutivo Zak Brown también es presidente no ejecutivo de Motorsport Network, que incluye motorsport.com, confirmó que las citas de Boullier eran precisas. No hubo comentarios inmediatos de Ferrari o la FIA.
El cuerpo gobernante dijo el miércoles que Mekies había renunciado a su cargo de director de carrera y que cesaría inmediatamente todos los deberes de Fórmula Uno. Dejará la FIA con sede en París a fines de junio.
Es una práctica habitual en la Fórmula Uno para los equipos poner a los empleados clave en 'licencia de jardinería' durante un período después de entregar su notificación.
El período de tiempo varía, sin embargo, de acuerdo con los contratos individuales y la ley laboral.
La viabilidad de tal "acuerdo de caballeros" entre equipos, en un deporte ferozmente competitivo cuyos jefes solían ser conocidos como "El Club Piraña", fue cuestionado por algunos expertos.