Poesía inédita de Luis Hernández Alfonso, escrita pensando en su esposa, María de los Dolores Rodríguez Cárdenas (1898-1994), desde la Cárcel de Baza, muy probablemente entre el 17 y el 21 de mayo de 1939. Su manuscrito autógrafo —cuya parte inferior con la fecha y la firma está rasgada— se conserva en el archivo familiar y ha sido fotografiado por la profesora Aurore Ducellier, a quien va toda nuestra gratitud.
Me anima la esperanza – de volver a tu lado,
de mirarme en tus ojos – y bañarme en su luz.
De seguir el camino – que tenemos trazado
ayudándonos ambos – a llevar nuestra cruz.
Me anima la esperanza – de llegar a la meta
—horizonte sin nubes – y calma sin dolor—[;]
de gozar, en silencio, – de una dicha secreta
sin ver, indiferentes, – en nuestro derredor.
Confío en que ese anhelo – se verá realizado[:]
tengo fe en mi destino – y confianza en ti.
Sé que has de darme mucho – por lo que ya me has dado
y que todo he de darte – por lo que ya te di.
Así, en mi cautiverio, – pasa el tiempo deprisa
—hambre que espera hartura – dicen que hambre no es—[.]
Sonará en mis oídos – el cristal de tu risa.
Y si ahora soñamos – ¡viviremos después!
Fotografía: Aurore Ducellier.