Me avergüenza necesitar un psicólogo. Pero realmente ¿ Lo necesito ?

Vivimos en una sociedad en la que los problemas están presentes en nuestra vida cotidiana. Aunque es normal que tengamos algunos problemas, puede ser que no sepamos enfocarlos correctamente.

A lo largo de nuestra vida pasamos por muchas experiencias, que pueden ser muy buenas o, por el contrario, ser perjudiciales para nosotros. Muchas veces sentimos algún tipo de frustración por este motivo, nos encontramos mal física y mentalmente sin causas, y no somos capaces de describir cómo nos sentimos. Algunas personas sufren ansiedad o se sienten deprimidos sin saber por qué, y no saben cómo poder superar todo esto.

El pedir ayuda a alguien nos cuesta, sobre todo porque no queremos que sepan cómo nos sentimos. Este planteamiento nos resulta vergonzoso y no nos sentimos bien si pensamos en ello. Pero, muy alejado de la realidad, cuando nos sentimos mal emocionalmente, lo mejor es acudir a un psicólogo para que nos ayude a superar el problema que tengamos.

¿En qué casos podemos necesitar un psicólogo?

No tenemos que estar locos para creer necesitar un psicólogo, muy al contrario de este pensamiento, cuando estamos frustrados por cualquier situación de nuestra vida, es bueno acudir a un profesional que nos oriente.

Y no solamente cuando tengamos ansiedad o problema necesitamos acudir a un psicólogo, sino cuando tenemos algunas situaciones que no sabemos resolver, podremos pedir ayuda a un guía para orientarnos correctamente. ¿En qué casos lo podemos necesitar?

-   Si tienes una relación de pareja, no estás a gusto y no sabes por dónde podrá ir la relación.

-   Cuando tienes que tomar una decisión importante en tu vida y tienes dudas para saber cuál sería la más correcta para ti.

-   Si tienes miedo o no tienes fuerzas para levantarte por las mañanas, estás desanimado.

-   Si sientes estrés o cansancio en el trabajo o en tu vida diaria.

-   Si has sufrido algún tipo de situación muy dura, como una muerte, un cambio importante, una separación…

-   Si tienes algún problema familiar que conlleva roces, gritos, malestar…

-   Sientes ansiedad, te cuesta respirar y no sabes por qué te pasa.

Como ves, en casi cualquier aspecto de nuestra vida, podemos necesitar la ayuda de un profesional para que nos abra la mente y podamos decidir con claridad. Por eso, no debemos avergonzarnos, es algo normal y no tenemos que estar mentalmente inestables para necesitar un psicólogo.

Artículo redactado por el Staff de SmartSalus.com