Me voy dando cuenta que me voy haciendo mayor. No, no es que me haya levantado hoy y mirándome al espejo me haya visto alguna arruga más...Esto, lo voy notando desde hace unos meses.
Os pongo sólo unos ejemplos, ahora cada vez que me compro crema hidratante sea para la cara o para el cuerpo la dependienta incluye algún " combatiente" más, antiarrugas, ácido hialurónico, borrador de arrugas, rellenador de arrugas, Pro-Xylane, péptidos, elastina, colágeno, radicales libres, plancton,caviar, polvo de perlas, oro o diamantes, proteínas de seda....y mejor no seguir porque hay hasta baba de caracol o veneno de serpiente ( reconozco que con esos ingredientes me dan cierto repelús, seguro que son cremas estupendas pero no me llaman mucho) pero creo que los milagros a Lourdes.
Ahora me viene a la cabeza una conversación con mis amigas hace unos días sobre retoques con botox, vitaminas, cavitación, masajes reductores.... parecía que estábamos hablando del catálogo de Corporación Dermostética. Esto no es todo, ahora muchas prendas son "Push up", pantalones, leggins, sujetadores….y por supuesto también la dependienta (que suele ser muy jovencita) también te lo recomienda para que te suba todo...hasta el ánimo te dice...claro que si haces la lectura inversa, en el fondo te esta diciendo "lo tienes ya todo caído, guapa"....y yo que estoy leyendo su mente pienso, ¿Caído? ¡Lo que he tenido y tengo son tres hijos! Aunque creo que el detonante de esta reflexión sobre la edad fue ayer cuando mi hijo mayor me preguntaba por un libro que no encontraba y yo le insistía que estaba en su cuarto donde los libros, como suele suceder en estos casos los niños casi siempre responden que no lo encuentran... y reconozco que me salió del alma mi respuesta " Como vaya yo y lo encuentre..." En ese momento, estaba oyendo la voz de mi madre.Sonreí y me dí cuenta que los hijos casi nunca encontramos nada de lo que buscamos...y las madres lo encontramos todo... Y ahora, yo estoy en el otro lado...