Ficha técnica
Título: Me llamo Lucy BartonAutora: Elizabeth StroutTraducción: Flora CasasColección: NefelibataEncuadernación: Rústica con solapasPáginas: 224Género: ContemporáneaEditorial: Duomo Ediciones
Sinopsis
En una habitación de hospital en pleno centro de Manhattan, delante del iluminado edificio Chrysler, cuyo perfil se recorta al otro lado de la ventana, dos mujeres hablan sin descanso durante cinco días y cinco noches. Hace muchos años que no se ven, pero el flujo de su conversación parece capaz de detener el tiempo y silenciar el ruido ensordecedor de todo lo que no se dice. En esa habitación de hospital, durante cinco días y cinco noches, las dos mujeres son en realidad algo muy antiguo, peligroso e intenso: una madre y una hija que recuerdan lo mucho que se aman.
Autora
Mi opinión
Me llamo Lucy Barton la anoté en mi lista de pendientes en julio, cuando se anunció su publicación. De la autora ganadora del Pulitzer por Olive Kitteridge, no había tenido todavía la oportunidad de leer nada. Si es cierto, aunque no tenga nada que ver, que vi la miniserie de Olive Kitteridge y me encantó.
Entonces recibirá la visita de su madre. Hacía 15 años que no se veían ni hablaban. Va a pasar con ella cinco días con sus cinco noches para volver a desaparecer después. Des de esa cama de hospital Lucy, Pispajo para su madre, nos empieza a contar episodios de su vida y su pasado.
Sin profundizar en exceso y de forma desordenada nos da pinceladas de momentos, sentimientos y personas que han pasado por su vida. Es una de esas historia en que importan más los silencios y lo que calla, que lo que nos cuenta. Conoceremos su infancia precaria viviendo en la más mísera pobreza. La mala relación con sus padres, y lo alejada que siempre se ha sentido de sus hermanos.
Me llamo Lucy Barton está divido en capítulos muy cortos ni numerados ni titulados, con ritmo fluido y sin pausa. Narrada en primera persona por Lucy, nos cuenta una historia centrada en la relaciones humanas de una forma muy directa. Elizabeth Strout nos muestra una prosa elegante que ensalza lo ordinario hasta deslumbrar, a través de conversaciones la mayoría de veces banales.
Al final nos damos cuenta que lo único que quiere Lucy es que le den un poco de cariño, reclama el amor de los suyos, y sobretodo de su madre. Una reflexión sobre lo que quiso ser, y pese a las decepciones y el mal de sus seres queridos, sigue queriendo ser.
"En este mundo es algo que te planeas constantemente: ¿cómo podemos tener la certeza de que no nos sentimos inferiores a otras personas?"
En definitiva, una historia sencilla en conjunto, pero repleta de complicadas relaciones humanas, narrada de una forma cercana y emotiva. La habilidad de la autora de contar lo ordinario y transformarlo en intimo y relevante, la hace una lectura muy recomendable.
Mi valoración: