Novela juvenil ligerita, muy entretenida y divertida, yo por lo menos me he reído bastante con las extravagancias de éste grupo de adolescentes. Medianoche de Claudia Gray es una saga más de las muchas que pululan ya por ahí, en las que se mezclan seres sobrenaturales, historias de amor y adolescentes, aunque la novedad de ésta es el elemento sorpresa, por eso no voy a adelantar mucho del argumento. Yo lo he leído sin saber de qué iba, y las sorpresas se han sucedido, hasta la gran sorpresa de la novela, con la que, como digo, me he reído bastante, porque no lo esperaba en absoluto. Medianoche es un internado situado en medio de un bosque, alejado de la civilización, parece que el mundo moderno no ha llegado aún a él: los móviles no funcionan y sólo hay un ordenador con conexión a Internet en una destartalada sala. El internado es de estilo gótico y bastante tétrico, con grandes salas y gárgolas que parecen vigilar a los alumnos. Bianca es una chica muy tímida a la que le cuesta muchísimo hacer amigos y relacionarse con los demás, sus gustos son más parecidos a los de sus padres que a los de una adolescente del siglo XXI: Frank Sinatra, Klimt o la literatura victoriana. Bianca odia Medianoche a donde la han enviado sus padres a estudiar, y donde , para mayor desgracia, ellos serán profesores. Es el primer año que Medianoche, elitista como pocos centros, ha abierto sus puertas a alumnos becados, lo que creará conflictos entre los alumnos de familias acaudaladas y los nuevos alumnos. Todo cambia para Bianca cuando conoce a Lucas, un chico sobreprotector con ella, ya que sospecha que algo extraño sucede en éste internado. Lo mismo le sucede a la amiga de Bianca, Raquel, quien tiene extrañas pesadillas y escucha horribles sonidos en el tejado por las noches. Por otro lado, Bianca se verá dividida entre su amor por Lucas y las atenciones que recibe de Balthazar, un alumno que va detrás de ella y que roza la perfección. Como digo, es muy entretenida, aunque tiene sus peros, principalmente respecto a los personajes que son bastante planos y llenos de tópicos: los chicos son guapísimos y se enamoran perdidamente de la protagonista al primer vistazo, vamos, como la vida misma. Bianca, que se ve a sí misma al principio como un patito feo y es muy introvertida, de repente se ve guapa y empieza a actuar como una persona muy extrovertida, sin que se sepa muy bien a qué viene éste cambio. Aunque la novela es más bien malilla, es la típica que se lee de una sentada, entretiene, y deja con ganas de más. Hasta el momento se han publicado otros dos volúmenes más: Adicción y Despedida
Novela juvenil ligerita, muy entretenida y divertida, yo por lo menos me he reído bastante con las extravagancias de éste grupo de adolescentes. Medianoche de Claudia Gray es una saga más de las muchas que pululan ya por ahí, en las que se mezclan seres sobrenaturales, historias de amor y adolescentes, aunque la novedad de ésta es el elemento sorpresa, por eso no voy a adelantar mucho del argumento. Yo lo he leído sin saber de qué iba, y las sorpresas se han sucedido, hasta la gran sorpresa de la novela, con la que, como digo, me he reído bastante, porque no lo esperaba en absoluto. Medianoche es un internado situado en medio de un bosque, alejado de la civilización, parece que el mundo moderno no ha llegado aún a él: los móviles no funcionan y sólo hay un ordenador con conexión a Internet en una destartalada sala. El internado es de estilo gótico y bastante tétrico, con grandes salas y gárgolas que parecen vigilar a los alumnos. Bianca es una chica muy tímida a la que le cuesta muchísimo hacer amigos y relacionarse con los demás, sus gustos son más parecidos a los de sus padres que a los de una adolescente del siglo XXI: Frank Sinatra, Klimt o la literatura victoriana. Bianca odia Medianoche a donde la han enviado sus padres a estudiar, y donde , para mayor desgracia, ellos serán profesores. Es el primer año que Medianoche, elitista como pocos centros, ha abierto sus puertas a alumnos becados, lo que creará conflictos entre los alumnos de familias acaudaladas y los nuevos alumnos. Todo cambia para Bianca cuando conoce a Lucas, un chico sobreprotector con ella, ya que sospecha que algo extraño sucede en éste internado. Lo mismo le sucede a la amiga de Bianca, Raquel, quien tiene extrañas pesadillas y escucha horribles sonidos en el tejado por las noches. Por otro lado, Bianca se verá dividida entre su amor por Lucas y las atenciones que recibe de Balthazar, un alumno que va detrás de ella y que roza la perfección. Como digo, es muy entretenida, aunque tiene sus peros, principalmente respecto a los personajes que son bastante planos y llenos de tópicos: los chicos son guapísimos y se enamoran perdidamente de la protagonista al primer vistazo, vamos, como la vida misma. Bianca, que se ve a sí misma al principio como un patito feo y es muy introvertida, de repente se ve guapa y empieza a actuar como una persona muy extrovertida, sin que se sepa muy bien a qué viene éste cambio. Aunque la novela es más bien malilla, es la típica que se lee de una sentada, entretiene, y deja con ganas de más. Hasta el momento se han publicado otros dos volúmenes más: Adicción y Despedida