Medicina alternativa

Publicado el 09 marzo 2012 por Demoniatentacion


Tres opciones curativas que muchos médicos alópatas utilizan hoy día, y algunas prácticas riesgosas que aconsejan evitar.
Aunque muchos médicos se mantienen escépticos, un reciente estudio de la Universidad Harvard reveló que los doctores recetaron remedios para cuerpo y mente a más de 6 millones de estadounidenses en el último año. Y la Asociación Estadounidense de Hospitales asegura que más de un tercio de los hospitlaes de este país ofrecen medicina integrativa. Quisimos saber las razones de esta tendencia, así que acudimos a varios profesionales reconocidos que, en la práctica, han otorgado el sello de aprobación a algunos remedios alternativos: ellos los utilizan con sus pacientes. Les preguntamos a estos especialistas cuáles usan y por qué.

Visualización mental dirigida para acelerar la recuperación tras una cirugía

Dr. Gulshan K. Sethi
Cirujano cardiotorácico en el Centro de Ciencias de la Salud de Arizona, y profesor en la Facultad de Medicina de la Universidad de Arizona
Por qué la uso: “Cada vez que veía a Andrew Weil [un gurú de la medicina integral] en un pasillo del hospital, apenas lo saludaba porque pensaba que sus ideas no eran científicas. Pero cuando mi esposa contrajo una grave afección autoinmune de la piel (parecía tener quemaduras de segundo grado en todo el cuerpo), el doctor Weil la curó con una combinación de remedios sobre la base de plantas y hierbas, biofeedback e hipnosis. ”Cuando empecé a explorar la medicina alternativa, me intrigó la visualización mental dirigida, en la que se usan sugerencias grabadas para ayudar a visualizar algo bueno; por ejemplo, células inmunitarias atacando un tumor. Diversos estudios serios indican que esta terapia puede ser muy útil para pacientes que están a punto de someterse a procedimientos similares a las operaciones de corazón que yo practico" “Esto se debe a que imaginarse recuperado le produce efectos físicos, como la reducción del ritmo cardíaco y un alivio más rápido. No todos mis pacientes aceptan probar este tratamiento, pero muchos toman en serio mi sugerencia (supongo que por ser tan poco ortodoxa). Yo mismo usé la visualización dirigida hace poco, cuando me reemplazaron una rótula, y creo que eso ayudó a que pudiera dar un breve paseo a las pocas horas de haber sido operado”.
Pruebas que la sustentan: Se han hecho pocos estudios rigurosos, pero los resultados son alentadores: la visualización mental dirigida redujo la necesidad de analgésicos en pacientes operados y les permitió salir del hospital antes de lo previsto.
Otros usos posibles: Para padecimientos que empeoran con el estrés, como el asma y la migraña.

Acupuntura para reducir el dolor

Dra. Lonnie Zeltzer
Directora del programa pediátrico para el alivio del dolor del Hospital Infantil Mattel de Los Ángeles, y profesora en la Facultad de Medicina David Geffen de la Universidad de California en Los Ángeles
Por qué la uso: “Las personas que sufren dolor crónico suelen experimentar un ‘efecto de bola de nieve’: cuanto más tiempo dura el dolor, más difícil resulta tratarlo. La acupuntura es uno de varios métodos que yo uso. No sé con exactitud cómo funciona, pero se sabe que aumenta el nivel de sustancias cerebrales que producen bienestar, como la serotonina y las endorfinas, y quizá también desactiva partes del cerebro que intervienen en la percepción del dolor. En un pequeño estudio que realizamos, niños que habían sufrido mucho a causa de un dolor intratable se sintieron mejor y durmieron con más facilidad tras seis sesiones semanales de acupuntura. Yo recomiendo esta técnica a todos los que sufren dolor, excepto a quienes temen a las agujas”.
Pruebas que la sustentan: Los resultados de las investigaciones no son concluyentes. En junio pasado, el Instituto de Medicina de los Estados Unidos notificó que la acupuntura “falsa” (en la cual las agujas se insertan en puntos que no son de acupuntura) funciona tan bien como la acupuntura real en algunos estudios y, aparentemente,ambas mitigan el dolor.
Otros usos posibles: Para reducir los síntomas del trastorno de estrés postraumático. También podría aumentar las probabilidades de que una mujer quede embarazada después de una fecundación in vitro.


Yoga para la depresión y la ansiedad

Dra. Patricia Gerbarg
Psicoanalista y profesora clínica en el Colegio Médico de Nueva York
Por qué lo uso: “Me interesé en la medicina alternativa luego de que los tratamientos alopáticos no pudieron devolverme la salud tras sufrir un acceso grave de enfermedad de Lyme. Este trastorno me afectó la memoria, las articulaciones y la energía, y lo que ayudó a recuperarme fue una hierba medicinal que me dio mi esposo, profesor de Psiquiatría en la Universidad de Columbia y experto en hierbas de todo el mundo. Después asistimos a una conferencia sobre el uso del yoga para tratar la depresión, y decidimos investigar más. Descubrimos que, aparentemente, los ejercicios respiratorios del yoga son eficaces para las personas que tienen depresión moderada e incluso grave. Reciben beneficios con solo inhalar y exhalar profundamente a un ritmo de unas cinco veces por minuto. Creemos que el cambio en la manera de respirar envía señales por el nervio vago para avisar al cerebro que el cuerpo está relajado, y entonces el cerebro también se relaja. Además, se reduce la respuesta de lucha o huida, y aumenta la actividad del sistema nervioso, la cual desciende mucho cuando uno está muy estresado. No existe ningún fármaco que pueda hacer eso.
”Aún receto medicinas a los pacientes que las necesitan, pero he visto personas con depresión, ansiedad e incluso síndrome de estrés postraumático que no responden a los fármacos ni a la psicoterapia, pero que mejoran después de practicar este tipo de respiración durante 20 minutos, dos veces por día”.
Pruebas que lo sustentan: Las técnicas de imagenología muestran que el yoga tiene efectos en la actividad cerebral. Se han realizado pocos estudios sobre los beneficios del yoga en el estado de ánimo, pero los resultados de uno de ellos son particularmente alentadores: cuando los sobrevivientes del tsunami de 2004 en el sureste de Asia aprendieron una forma de respiración de yoga, su nivel subjetivo de depresión se redujo en un 90 por ciento, mientras que otros sobrevivientes en campamentos de refugiados no tuvieron ninguna mejoría significativa. Otros usos posibles: Para tratar el insomnio, la hipertensión, el asma y el dolor de espalda.