Médicos cubanos “exportados” y estudiantes de medicina “reprimidos”.

Publicado el 10 septiembre 2010 por Santiagomiro

Médicos cubanos.


Cuba es el país del mundo con más médicos por habitante. En 2007, había en la isla un médico para cada 155 habitantes, cuando en Europa occidental sólo había uno para 330 y, en los EEUU, uno para cada 417. Basado en esta superabudancia de galenos (Cuba afirma tener un total de 70.000), el Gobierno promueve, desde hace décadas, la “exportación” de médicos, enfermeras y técnicos de la salud para ganar influencia diplomática en los países pobres, a la vez que consigue divisas para su tambaleante economía. Se estima que 38.544 profesionales cubanos de la salud prestaban servicio en el extranjero en 2008 y que 17.697 de ellos eran médicos. Estos “misioneros de la revolución” son bien recibidos en Argelia, Bolivia, Venezuela, Paraguay, Uruguay, Brasil, Portugal y otros países del mundo. Sin embargo, quienes aplauden la generosidad del Gobierno cubano suelen pasar por alto aspectos menos glamorosos de la diplomacia de la salud.
María C Werlau escribe en “The Wall Street Jornal” la forma en que son tratados estos profesionales de la salud. “En febrero –escribe esta directora ejecutiva de Archivo Cuba, una organización no lucrativa de derechos humanos–, siete médicos cubanos que trabajaron en Venezuela y más tarde desertaron, presentaban una demanda en un tribunal federal de Florida contra el Gobierno cubano, el de Venezuela y la empresa petrolera estatal venezolana PDVSA, por mantenerlos en condiciones equivalentes a una ‘esclavitud moderna’. Ellos afirman que el régimen cubano retenía los fondos que le remitía Venezuela por sus servicios, y luego les pagaban, un arreglo que ––dicen— es una forma de ‘servidumbre por deudas’. Aseguran que eran obligados a trabajar jornadas extremadamente largas en zonas peligrosas, incluyendo áreas urbanas con altos índices de criminalidad, y en la selva. El Gobierno de Venezuela y su empresa petrolera han cuestionado la competencia del tribunal para escuchar el caso; Cuba no ha respondido”.
Según cuenta C. Werlau, el país anfitrión paga a Cuba en divisas por cada trabajador de la salud. A éste se le ofrece alojamiento, alimentación y un estipendio mensual que suele oscilar entre 150 y 350 dólares. La Habana cubre los gastos de los pasajes aéreos y el apoyo logístico, y paga los salarios de los trabajadores de la salud, utilizando los fondos que retiene. “Los proyectos globales de salud cubanos también reciben contribuciones del mundo desarrollado. En 2005, al menos 27 millones de dólares fueron donados a la misión de Cuba en Haití, incluyendo aportes de Francia y Japón. La buena voluntad internacional se traduce también en ayudas directas. En 2008, Cuba recibió 127 millones de dólares de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. Estas transferencias explican el reciente aumento de las exportaciones de servicios cubanos que, de 2.800 millones de dólares, en 2003, pasaron a 8.600 millones, en 2008”.
Los médicos cubanos que, en su país, ganan unos escasos 25 dólares mensuales, prefieren ejercer en el extranjero. Aunque reciban un pequeño estipendio en moneda local, sus familiares, en su isla, reciben el salario habitual más un pago en divisas entre 50 y 325 dólares mensuales… Pero miles de profesionales de la salud cubanos que ejercían en el extranjero han desertado. Y casi 1.500 han llegado a Estados Unidos, desde 2006. En su crónica, C. Verlau habla de la escasez de médicos cubanos en la isla y de los centros de salud en ruinas. Los pacientes, o sus familiares hasta tienen que llevar al hospital su propia comida y ropa de cama”.
Por otra parte, recogemos este vídeo aparecido recientemente en Internet, en el que fuerzas antimotines cubanas arremeten contra estudiantes paquistaníes en la escuela de medicina de Jagüey Grandes (Cuba) y aplastan brutalmente la protesta. Maria Elvira Live, de MegaTV, presentaba y comentaba el pasado miércoles estas imágenes.