El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en Córdoba, durante su visita a la Semana Santa.El consejero de la Presidencia andaluza, Elías Bendodo (PP) anunciaba el pasado martes que el presupuesto para el año 2019 recogerá una partida de 500.000 euros, prevista para incrementar en años posteriores, destinada a las cofradías y hermandades de Andalucía para la restauración de sus imágenes y otros bienes muebles “relacionados con estas devociones”. Es la primera vez que la Junta de Andalucía, gobernada por una coalición del PP y Ciudadanos después de 37 años de gobiernos del PSOE, compromete una subvención de este tipo y supone el cumplimiento del acuerdo que firmó el PP con Vox para garantizarse la investidura del hoy presidente, Juanma Moreno. Para Bendodo, la Semana Santa, además de tener un “carácter religioso”, es “sobre todo una manifestación cultural que este gobierno tiene la obligación de preservar y proteger, además de ser un motor económico por su contribución al turismo”. El consejero de la Presidencia aseguró que “este Gobierno apuesta sin complejos y sin ningún tipo de ambages por la Semana Santa de Andalucía, uno de los patrimonios históricos y artísticos que tenemos en nuestra tierra. [El Ejecutivo] valora el esfuerzo que hacen, día tras día, en mantener y poner en valor ese patrimonio que sacan a las calles sin recibir contraprestación”. Esta claridad discursiva de Bendodo en este asunto contrasta con lo que vienen manifestando diferentes portavoces del PP al respecto de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica y las ayudas a los colectivos que se dedican a ello. El partido de ultraderecha, del que depende la estabilidad del Gobierno de Andalucía, ya ha manifestado que votará en contra de un presupuesto que recoja partidas para aplicar la Ley de Memoria. El PP tiene firmado con Vox un pacto en el que se recogen, entre otros, estos tres acuerdos. Por un lado, “eliminar toda convocatoria de subvenciones a personas físicas o jurídicas que no cumpla evidentes fines de utilidad pública y social”, y, por otro, “promover una Ley de Concordia que sustituya a la ley de memoria histórica”. Y, por último, “apoyar y promover las expresiones culturales y populares andaluzas como el flamenco o la Semana Santa”.