En plena era en que florecen “músicos” que enardecen y descontrolan a las masas con sus sonidos electrónicos y computarizados, como sacados de un garaje noventero, aparece nueva sangre para darle un poco de vida a un estilo de música que viene siendo “asesinado” por los críticos desde los tiempos de Chuck Berry: el rock and roll.
Hablamos de The Orwells. El quinteto conformado por: Mario Cuomo (voz), Dominic Corso (guitarra), Matt O’Keefe (guitarra), Grant Brinner (bajo), and Henry Brinner (batería), viene como una gran nube negra cargada de tormenta, estridencia y caos a llover por todas partes.
Oriundos de la ciudad de Chicago, Illinois, EE.UU, la banda ya cuenta con dos álbumes (Remember When (2012) y Disgraceland (2014) los cuales han sido bien recibidos por la fanaticada y los oyentes y, obviamente, por quien esto escribe, quien sediento de nuevas bandas, ha venido a descubrir con aun hay esperanza y vida para las guitarras y las baterías.
Admiradores en su momento de The Strokes, su sonido guarda ese perfecto equilibrio entre desprolijidad y control. Si se trata de distorsión de guitarras, alaridos de su vocalista y ritmo de batería demoledor, ellos se hacen cargo de todo esto y más, no dejando títere con cabeza.
Si se trata de hablar de sus letras, estas podrían parecer no ser tan profundas pero, ¡qué importa! Las etapas en la vida se queman de a una. Y estos recién salidos de la escuela ya tendrán tiempo para dedicarse a reflexionar. Por ahora, lo único que importa es sonar fuerte, cantar al desamor, a la desilusión con la política, y el estilo de vida americano (basta con leer el título que lleva su segundo trabajo Disgraceland, lo cual se traduce algo así como la tierra de la desgracia o la deshonra).
Los tiempos monótonos en los que vivimos solo pueden ser rotos por bandas que suenen fuerte, griten y pataleen. Bandas que nos saquen del congelamiento mental en el que nos sume la “realidad” impuesta por los de arriba. The Orwells viene a sacudir las melenas y cuerpos de los que aun creemos en las guitarras, bajos y baterías, y que celebramos cuando cualquier persona o banda canta cosas como: You better join the army/ I said: no thank you dear old uncle sam (Si quieres, únete al ejército/ Pero yo digo, no gracias Tío Sam. (Parte de la letra de la canción Who needs you).
Algo es algo ¿no?
Por Pablo Mirlo: pablomirlo.wordpress.com