En el último Memory Card os rescatábamos un juego de PlayStation llamado Klonoa. En esta ocasión el título que hoy os traigo es conocido por todos; fue uno de los grandes Beat´em up de finales de 80 y principios de los 90, este título no es otro que Final Fight.
Nos remontamos al año 1989 en el que aparece en los salones recreativos el título creado por Capcom Final Fight, un Beat´em up que se desarrolla en la ciudad imaginaria de Metro City que desbordada por la delincuencia se ve al borde del caos. Su Alcalde Mike Haggar no duda en ponerse “el traje de faena” y salir directamente a la calle para combatir el crimen desde la primera línea de fuego ya que su hija Jessica ha sido secuestrada por la mafia. Pero no estará solo, puesto que Cody (amigo de Jessica) y Guy le acompañan en dicha empresa.
A lo largo del juego nos encontraremos con unos decorados bastante resultones y unos enemigos de un tamaño considerable y bastante bien animados. El número de estos mostrado en pantalla de manera simultánea es muy abultado, llegando a veces esto a disparar la dificultad (pequeño lastre) del título. Era de entender puesto que estamos hablando de un juego de salón recreativo, en el que su función era recaudar. La variedad de enemigos era también bastante grande, pero una vez pasados las tres primeras fases se repetían hasta la saciedad, cosa también entendible por la capacidad de los juegos en aquella época.
Debido al éxito del juego en los salones recreativos la compañía Nintendo consiguió en exclusiva los
En 1991 apareció para: Amstrand CPC, Amiga, Commodore 64 y mi querido Spectrum, todos ellos a un buen nivel dentro de sus limitaciones gráficas y sonoras.
En ese mismo año (1993) apareció el único título programado para la competencia, Sega, y más concretamente para ese aparato tan bueno como olvidado llamado Sega Mega Cd. El título obviamente fue “Final Fight CD”, que era un port de la versión arcade del juego en el que podíamos elegir a cualquiera de los tres personajes originales. La principal baza era la calidad de las músicas que utilizaban el soporte del CD para rallar a un nivel nunca oído hasta la fecha en Final Fight. Cierto es que llegó quizás demasiado tarde y a un formato el cual desapareció casi sin pena ni gloria como fue el Mega CD. De hecho, la salida en exclusiva de Final Fight en Super Nintendo fue el detonante para que apareciese otra de las mejores sagas de Beat´em up: Street Of Rage, pero de esto hablaremos en otra ocasión.
A lo largo del juego nos encontraremos con unos decorados bastante resultones y unos enemigos de un tamaño considerable y bastante bien animados. El número de estos mostrado en pantalla de manera simultánea es muy abultado, llegando a veces esto a disparar la dificultad (pequeño lastre) del título. Era de entender puesto que estamos hablando de un juego de salón recreativo, en el que su función era recaudar. La variedad de enemigos era también bastante grande, pero una vez pasados las tres primeras fases se repetían hasta la saciedad, cosa también entendible por la capacidad de los juegos en aquella época.
Y ya sin extenderme más recomendar posiblemente la versión más difícil (la arcade de los salones recreativos) pero la que más calidad tiene sin duda y si puede ser a dobles mucho mejor, eso sí os hará sudar la gota gorda si no queréis usar los famosos continúes. Continue?