Los últimos datos llegados desde el gobierno nacional no son auspiciosos para los gobernadores. Las transferencias de la administración central por Coparticipación Federal presentaron, en esta primera quincena de abril, una caída interanual del 19%, sumando algo más de 12.700 millones de pesos.
Así lo detalla un reciente estudio de la consultora Economía & Regiones (E&R) en el que se destaca que si se ajusta por cantidad de días hábiles, el resultado se revierte y evidencia un crecimiento del 12%, explicado en parte por la devolución de 6 puntos porcentuales de la afectación de la masa coparticipable retenida por Anses en aquellas jurisdicciones no beneficiadas por los fallos de la Corte Suprema de Justicia. Sin embargo, no tomando en cuenta este efecto, las transferencias se desplomaron a un ritmo del 17,5% anual.
Por el Fondo Federal Solidario (FFS), que es lo que se coparticipa de las retenciones por las exportaciones de soja, se transfirieron en esta primera quincena cerca de 510 millones de pesos, cifra que muestra un desplome del 53% cuando se la relaciona con los montos del mismo período del año anterior.
Combinando ambos ingresos, el monto transferido a todas las provincias en la primera quincena de abril de 2017 asciende a 13.238 millones, marcando un retroceso interanual del 21%, y una caída nominal de 3.473 millones respecto a los montos observados en el 2016.
Un dato más que negativo para las administraciones subnacionales teniendo en cuenta la dependencia que tienen sobre sus ingresos estas dos partidas y los desequilibrios presupuestarios que vienen arrastrando en estos últimos años producto del creciente gasto público observado.
Nuestra región no quedó fuera de este complejo escenario. Sin embargo, el impacto no es el mismo para las cuentas rionegrinas que para las neuquinas.
La importante participación que tienen las transferencias nacionales sobre los ingresos totales de Río Negro marca la diferencia. Según los datos oficiales, durante el 2016 los recursos presupuestarios por todo concepto en la administración Weretilneck alcanzaron los 27.400 millones de pesos, concentrando el 50% de ellos las partidas de Coparticipación y el FFS .
En la primera quincena de 2017 llegaron a las arcas rionegrinas por estos dos conceptos algo más de 309,5 millones de pesos, cifra que refleja un desplome del orden del 21% cuando se la relaciona con los ingresos del mismo período del año anterior. En valores absolutos, esta caída representa 82 millones de pesos, en solo 15 días del año.
Si bien los valores son importantes, el estudio de E&R resalta que las proyecciones para todo abril no serán tan negativas, ya que es posible que exista una recuperación en la segunda quincena que permita revertir este escenario. Las optimistas proyecciones para todo el mes en curso muestran un crecimiento global sobre las transferencias nacionales del orden del 23% interanual, un número relativo que igualmente se ubica por debajo de los índices de inflación. Por lo tanto, en valores reales la administración rionegrina percibirá menos recursos por estas partidas respecto de abril de 2016.
Desde hace tiempo el gobernador Weretilneck está observando la progresiva caída de los recursos que llegan de la mano de estas dos partidas. Es más, el mandatario provincial en su discurso atribuye el enorme déficit presupuestario registrado sobre las cuentas del 2016 a una caída de los ingresos producto de un desplome sobre las transferencias nacionales.
Neuquén está en esta misma línea, pero el impacto es mucho menor ya que su caja no tiene una dependencia tan importante con Nación, como sí se observa en Río Negro.
Los datos oficiales de la administración Gutiérrez dan cuenta de que los recursos presupuestarios totales en el 2016 se ubicaron en torno a los 43.000 millones de pesos y algo más del 20% llegó de la mano de las transferencias nacionales mencionadas.
En la primera quincena de abril ingresaron a las arcas neuquinas por esta vía algo más de 217 millones de pesos, mostrando una baja interanual del orden del 20%. En valores absolutos, dejaron de ingresar en sólo 15 días alrededor de 57 millones de pesos. Un valor también importante teniendo en cuenta que Neuquén está pasando por un momento en donde escasean los recursos y los gastos no paran de crecer.
Hacia adelante
Según distintas proyecciones privadas, las transferencias nacionales hacia las provincias mostrarán un crecimiento en el 2017 del orden del 20% interanual. En este número se incluye la devolución de 6 puntos porcentuales de la afectación de la masa coparticipable retenida por Anses.
Si uno toma las estimaciones de inflación para ese mismo período, la mayor parte de las consultoras la ubican entre el 21% y 25%. En decir que, en valores reales, las administraciones subnacionales deberán proyectar menos ingresos por Coparticipación Federal y FFS para este año.
En los últimos tiempos, estas partidas venían creciendo por encima de todo indicador y estos excedentes extraordinarios fueron usados, en la mayoría de las provincias, para consolidar gasto corriente. Hoy con un reacomodamiento de la economía a nivel global, estos recursos tienden a mermar y los gobernadores no cuentan con las herramientas apropiadas para compensar sus desequilibrios. De ahí que muchos de ellos recurren al endeudamiento para salvar esta situación. No está de más decir que tomar deuda para pagar gastos corrientes (salarios) es lo peor que cualquier administración puede hacer, ya que se consolidan pasivos que no tienen posibilidad de repago.
Los menores ingresos generados por la Coparticipación Federal se deben al estancamiento que está sufriendo la economía a nivel global. El consumo no se recupera y eso se ve en la recaudación del IVA, uno de los tributos que se coparticipa. Otro es Ganancias, que no muestra una mejora producto del mal momento que están pasando las empresas.
En relación al FFS, el tema de un dólar anclado y subvaluado respecto del peso hace que los tributos sobre el complejo oleaginoso no terminen de impactar con la fuerza que se esperaba en la economía de las provincias. Muchos productores, frente a este escenario, retienen ventas a la espera de un dólar más competitivo. De ahí que la caída de los ingresos por el FFS haya sido tan marcada en esta primera parte de abril. Por otro lado, las recientes inundaciones proyectan una menor cosecha de soja para este año. Otro dato a tener en cuenta.
Las provincias estiman que en el segundo semestre se observará una recuperación de la Coparticipación Federal producto de una mejora general en el nivel de actividad de la economía del país. Las expectativas de los gobernadores están puestas ahí.
de los recursos totales que ingresan a las arcas de Río Negro llegan de la mano de la Coparticipación Federal y FFS.
son los millones que dejaron de ingresar a la región sólo en los primeros 15 días de abril.
ss la participación relativa promedio que presentan las transferencias mencionadas sobre los ingresos totales que llegan a Neuquén.
Río Negro. La situación es compleja teniendo en cuenta la dependencia que tiene la Provincia de los recursos nacionales.
Neuquén. La administración Gutiérrez también sufre estas consecuencias, a lo que se le suma el descontrol presupuestario de la Provincia.