Se puede ser un gran seductor de muchas maneras, desarrollando algunos aspectos personales: Aparte de que seas guapo o no, puedes cuidar tu físico y tu imagen, vestir con gusto, tener un trato agradable, conversación interesante y sentido del humor, ser independiente económicamente y tener tu propia vivienda, coche, etc. En fin, una serie de valores que serán apreciados a la hora de encontrar pareja o sólo de ligar.
LA MENTALIDAD DE ABUNDANCIA
Sin embargo, hay un aspecto que para mí es una de las guindas más dulces que puede alcanzar uno, y esposeer mentalidad de abundancia. Quiero diferenciar entre poseerla y aparentar que la poseemos. Mientras que todas las cosas que he mencionado arriba son cosas reales y tangibles, la mentalidad de abundancia es algo que a veces se puede aparentar muy bien, pero en el fondo, cada uno, dentro de su conciencia, sabe si esto es cierto o no.
Uno puede decir, “Bueno, qué más da si es cierto o no. Si aparento que la tengo, de cara a mis amigos y las chicas que ligo, y ellos se lo creen, funciona igual. Tendré éxito entre las chicas y el respeto de otros tíos“. Pero esto no es cierto del todo. Porque para mí, lo más importante de todo, es cómo nos sentimos por dentro.
- Si dudamos que todo lo que nos rodea ahora y aparentemente va bien, en cualquier momento se puede derrumbar.
- Si mantener esa imagen es una especie de máscara y nos supone un esfuerzo mantenerla, para no ser descubiertos.
- Si aparentamos una mentalidad de abundancia, pero por dentro sentimos inseguridad, miedo, fragilidad, incertidumbre.
Si te ocurren estas cosas, entonces podrás tener esa imagen exterior, pero las satisfacciones que obtienes de ellas son pequeñas, temporales y poco profundas. Alcanzar una mentalidad de abundancia interior va muchísimo más allá. Pero claro, esto no es fácil.
De hecho, nos encontramos a menudo que hay gente que al no poder alcanzar este punto, pone en práctica un conocido refrán: “En el país de los ciegos, el tuerto es el rey”. Entonces, uno puede elegir un círculo de amigos en el que él destaque, ir a por chicas que se impresionan fácilmente con cualquier cosa que le digas, etc. No me parece una opción demasiado mala, pero para mí tiene dos pegas gordas:
PROBLEMAS DE APARENTAR LA MENTALIDAD DE ABUNDANCIA
Una, que si uno se siente cómodo en ella y no ambiciona más, se va a quedar ahí estancado, sin atreverse a salir, y sin darse una oportunidad de crecer y de poder descubrir el potencial que tiene dentro.
Y otra, que esta supuesta mentalidad de abundancia realmente no es propia, ya que depende del contexto que nos rodea. Si salimos de nuestro círculo, nos sentiremos bastante pequeños y cortitos cuando nos comparemos con otras personas que nos saquen ventaja.
También hay otra opción bastante común y extendida, que es “si yo no puedo subir, te bajo a ti“. Esto lo he visto mucho tanto en grupos de chicos como de chicas. A menudo se hace a modo de broma y chiste, también de crítica, tanto directa como por la espalda. Pero el objetivo principal es el de restarle valor a los que nos rodean. Huelga decir que esto de mentalidad de abundancia no tiene nada, sino más bien todo lo contrario. Demuestra una gran falta de valor personal y mucha inseguridad. Es conveniente que nos observemos nosotros mismos, porque esto a menudo lo hacemos de forma inconsciente.
También en este aspecto están el uso de ciertos tipos de negas y la idea de algunos de que uno de los mejores métodos para seducir es ser un cabrXX y tratar mal a las mujeres. En este caso, el tío siente que la chica deseada está tan fuera del su alcance que lo único que se le ocurre es utilizar recursos que la humillen, la bajen a su nivel y aprovechar esa debilidad. Bueno, ya entré en un debate sobre esto y la gente que lo utiliza no tiene demasiada capacidad de ver más allá. Pero sin duda me parece que estas técnicas son de lo más patéticas y escasas que te puedes encontrar. El tío que las usa no lo reconocerá jamás, pero por dentro él sabe el vacío tan grande que tiene que no puede llenar con nada, y utilizar estas técnicas es un último recurso desesperado porque no sabe hacerlo de otra manera.
Sin embargo, podemos cultivar una mentalidad de abundancia interior sólida. En la segunda parte hablaré de cómo hacerlo. Prometo no hacerme esperar