Ya están aquí las Navidades, esas fiestas tan insoportablemente entrañables, llenas de puñales familiares, amores por obligación y comilonas que ponen los pelos como escarpias a los irredentos cuentacalorías que ven cómo sus cimientos gastronómico-vitales ceden cual edificios construidos sobre terrenos poco firmes. Y ya está la blogosfera culinaria que hierve de cocinillas afilando sus armas para luchar por el menú más visto. Así que en La Gastrocinemia nos unimos al tradicional desmadre: que viva la falta de lógica y la apología del consumo. El menú que os propongo se compone de unos entrantes donde reinan el marisco y el pescado, un clásico para el plat de résistance (hoy me siento francófilo). Y dos postres para elegir. (Eso sí, recuerde que cada elección es también una renuncia). Y vamos a ello. (Como siempre, la receta completa puede verla pinchando en el enlace) Entrantes. 1 .Ensalada de brotes y berberechos con alioli de ajos asados 2 .Mejillones gratinados con bechamel de gambas 3.Almejas con salsa de cava 4 .Brocheta de langostinos y vieiras al brandy con rabanitos asados. 5.Croquetas de rape Plato principal. Cordero asado Postre Sorbete de uvas y ribeiro Arroz con leche y almendras