Fiel a lo que viene siendo el discurso de Mayte Parra en sus últimas intervenciones, el texto utiliza las expresiones "comunistas", "socialistas" o "Nicolás Martínez" para referirse a los tres partidos de la oposición en el Ayuntamiento de Ibi, mientras que para referirse al gobernante utilizan las siglas PP. No me parece correcto: si hablamos de partidos, deben usarse las siglas ADI'i, PSOE o EUPV, pero si hablamos de ideologías debería hablarse también de "fascistas" o "fachas". Pero bueno, esto es lo de menos.
La curiosidad del artículo viene de la metáfora que se utiliza, recurriendo al "ménage à trois" que, como todo el mundo sabe, es una expresión que describe un acuerdo doméstico en el que tres personas que mantienen relaciones sexuales habitan el mismo hogar. Para la mente calenturienta que ha escrito ese texto, el hecho de que los tres portavoces de la oposición mantengamos buenas relaciones significa que, además, esas relaciones tienen contenido sexual.
Siento decepcionar al desviado/a que ha escrito tales insinuaciones. Como dirían en Hollywood "a Dios pongo por testigo" de que jamás le he dicho "Te quiero un huevo" o "Lo nuestro es muy bonito" a Nicolás Martínez ni a Antonio Martos, pese a que los quiero bastante (en el sentido de que los aprecio, no vayan a pensar otra cosa). Y pese que nos llevamos bastante bien en lo personal, las "mojaditas" y otras guarrerías las dejamos fuera de nuestros quehaceres diarios.
Me llama mucho la atención que se utilice la metáforma sexual por quien ha sido capaz de cohabitar con tirios y troyanos con tal de mantenerse en el poder. Me estoy refiriendo concretamente a la legislatura pasada (2003-2007), en la que el Partido Popular no tenía la mayoría absoluta y tuvo que gobernar a base de hacer favores inconfesables a transfugas de distinta orientación, apareándose (en sentido figurado) con quien hiciese falta para seguir manteniendo la poltrona.
Estoy convencido de que si el/la autor/a de esa lamentable apología del sexo en grupo, se quitase el preservativo de la cabeza, vería las cosas de otra forma. Mirando a Valencia comprobaría que los más pervertidos del lugar militan en sus filas y ostentan cargos de responsabilidad en su partido. Observaría que los más depravados compartieron mesa y lecho con los corruptos, llegando a prostituir incluso la visita del Papa a Valencia con tal de llevarse el dinero a la saca.
En el fondo, me dan más pena que otra cosa. Con ese tipo de columnas incendiarias lo único que demuestran es que para ellos la amistad es incompatible con la política. Es muy triste, pero es la postura lógica para quienes llevan más de 4 años sin poder confiar en nadie, de traición en traición, cortando cuellos a leales y desleales. Con ese "equipo" es imposible mantener el más mínimo escarceo y, cuando la carne aprieta, sólo queda el recurso al onanismo. Bien, no tengo nada contra el sexo en solitario como solución, pero, por favor, lavénse las manos antes de empezar (que los billetes arrastran muchos microbios).