Algún día, alguno, hablaré sobre la saga que me tiene encandilado durante más de una década. Siendo conciso desde el año 1998. Estoy hablando de Metal Gear Solid, una (y no suelo decirlo prácticamente nunca) obra maestra sin discusión. Tendrá algunas entregas que serán mejores que otras, pero haciendo un cómputo general Hideo Kojima lo ha bordado y no es de extrañar que sea uno de los grandes creadores en la industria de los videojuegos.
Hoy voy a tocar una simple cosa. Algo que cuando puse Metal Gear Solid 2 me puso la piel de gallina y ha sido una constante en cuanto al tono de llamada de mi teléfono móvil desde hace lustros (más concretamente desde que tuvimos la opción de poner la música que queríamos).
El tema de Harry Gregson-Williams, compositor de películas bien conocidas por todos, es para mí uno de los mejores que he escuchado en un juego (y casi me atrevería a decir que en un medio de entretenimiento -incluído el cine-). Desde luego lo he escuchado innumerables veces y siempre tengo la misma sensación. Un TEMAZO con mayúsculas. Hay películas que tienen una simbiósis especial en cuanto a la imagen y el sonido (Blade Runner, Birdy, Amelié, etc…), Metal Gear Solid 2 no se puede comprender sin esa banda sonora tan especial que se extendió en otras entregas posteriores (y eso que la primera entrega ya tenía lo suyo, hablando positivamente).
Os dejo el trailer del citado juego donde podéis escuchar el tema que comento. Una delicia la verdad.