Hardwired... To Self-Destruct[Blackened Recordings]★ ★ ★ ★
[Ricardo Portmán] @ecosdelviniloEl nuevo disco de Metallica deja en al aire la duda si es para lanzar las campanas al vuelo. Podría verse como una continuación lógica de Death Magnetic (2008) o el rejuvenecimiento de una de las últimas grandes bandas. Lo cierto es que es un muy buen disco (doble). Son ochenta minutos con guitarras más inspiradas de lo esperado y de un Lars Ulrichdándole a los parches con un fervor inusitado. Los tres primeros sencillos han puesto toda la carne en el asador, porque si no calan no estará garantizado el disfrute del resto del nuevo material.
Los patrones de tejido de las ESPs de James Hetfield y Kirk Hammett deslumbran sin inventar ni forzar los engranajes, simplemente se dejan llevar -con buen gusto- por el oficio de su veteranía. Cortes como Now That We’re Dead, Atlas, Rise! y Murder One hacen reverdecer la esperanza de que no todo esta perdido y estos Metallica al fin han comprendido que menos es más: menos reinvención y más mirar hacia dentro es la clave del mantenimiento de su institución. Metallica dejó las concesiones y vuelve a disfrutar, y en su gozo podemos intuir un aplauso global de los viejos fieles y el despertar de la curiosidad de los nuevos. Hardwired...To Self-Destruct, solo por la fe implícita en su materialización, triunfa -ojalá esto no sea un placer efímero-.
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