Hace algunos meses Juliette enfermó y los veterinarios dieron 2 veredictos: tumor cerebral o un problema cervical que solo se solucionaría con cirugía.
Por cierto, aprovecho para agradecer a todos aquellos que se mantuvieron pendientes de su salud. E incluso muchos todavía preguntan por ella. Está amargada y llorona como siempre :)
Debido a su estado de salud, siempre muy débil desde que la adopté, y por su edad. Decidí esperar y no ponerme a operarla. Hacer un tratamiento con cortisona y tener paciencia. Como no los recomendó nuestro veterinario de España.
Luego de una semana en tratamiento, ella comenzó a mejorar y los episodios de dolor comenzaron a prolongarse. De tener 4 diarias, comenzó a ser 1 hasta que desaparecieron y volvió a ser la misma de siempre.
Al día de hoy, no sabemos realmente qué puede ser lo que le produjo esas 2 semanas de ataques de dolor. Pero no descartamos la depresión.
Juliette es una perra rescatada. Y desde el principio creo una gran conexión conmigo. Tanta que cuando yo estoy tiempo fuera ella deja de comer y se pone triste. Su enfermedad coincidió con un viaje en el que yo estuve un mes fuera, por lo cual no es descartable que lo que experimentó fue un cuadro depresivo.
Existe otra teoría que es la intoxicación, que es un post que tengo pendiente, porque luego de 3 meses Pierre comenzó con un cuadro similar a este, pero del que ya está recuperado.
En estos 2 vídeos podrán ver cómo se aceleraba su respiración y cómo se paralizaba su patita izquierda y su cara se quedaba como también paralizada. Luego de pasar los episodios, que podían duran entre 30 minutos y 4 horas, se quedaba tranquila y normal.
En todo caso, sigo muy atenta de su comportamiento, ya que nada es descartable, pero a su edad prefiero mantenerla lejos de la cirugía y de situaciones de estrés. Sobre todo porque es una perrita muy nerviosa y sensible.