Lunes, ¡otra vez! Y aquí estamos de nuevo con otra entrada sobre los síntomas de mi embarazo. Si no existieran, ¿no habría posts? Hoy cumplo 24 semanas, y se acerca el momento de mi nuevo Test O’Sullivan.
Estoy cagada, claro que lo estoy, porque el anterior me salió alterado y tuve que hacer la curva larga. Fue traumático porque tuve que hacer una dieta previa durante tres días que junto con las náuseas, no fue nada fácil. Además, os recuerdo que no me pudieron poner vía, así que me pincharon 4 veces prácticamente en el mismo sitio.
Pero va, no me enrollo más. ¡Allá vamos!
- Ascos a mis comidas favoritas
El pasado viernes fuimos a cenar con unos amigos. Pidieron pinchos morunos y pensé “con el adobado que tienen, fijo que me los puedo comer”. Pues no. Añado el cerdo a mi lista de ascos. ¡Qué faena!
- Pechos
Esta semana tuve un día con unos pinchazos muy fuertes en el pecho derecho. Y yo me miraba a ver si tenía algo, pero ahí no había nada.
Si que he notado que últimamente tengo las areolas y los pezones mucho más oscuros. Pensaba que no me iba a llegar ese famoso momento, y ya está aquí.
- Flujo
Esto sigue igual. Tengo un flujo muy abundante que mezclado con el sudor es bastante desagradable. Intento cambiarme todo lo que puedo para no tener la zona húmeda demasiado rato.
- Dolor de espalda
El dolor de espalda ha pasado a ser, a ratos de lumbares, a ratos de espalda entera e incluso, mi querido piramidal.
El viernes me desperté con la cadera izquierda engarrotada, exactamente igual que me pasó hace varias semanas cuando tuve que coger la baja. Por suerte, parece que no ha ido a más, y ha dejado de doler.
- Tránsito intestinal
La avena que me tomo todos los días está haciendo su trabajo, y no hay día que falte al baño. Aunque no siempre ocurre a la hora más adecuada, pero bueno… cuando siento la llamada, intento atenderla, ¡ja ja!
- Ganas de hacer pipí
Puedo estar meándome muchísimo, visitar al Sr. Roca y que no salga apenas nada. Y a veces, puedo aguantar el pipí durante horas y mear un montón sin casi enterarme. No sigo un patrón. Es así.
- Síndrome del túnel carpiano
Esta semana me ha seguido pasando. Despertarse con la mano derecha dormida es bastante desagradable, pero es lo que hay.
- Movimientos de bichito
Mi niño es un pequeño guerrero. Me da la sensación de que duerme poco, porque no suelo estar mucho rato sin notarlo.
Tengo ganas de que sea más grande y poder decir “esto es el culo” o “esto es la cabeza”. Ahora no sé si me da puñetazos o patadas.
Podéis ver aquí los síntomas de la semana 21, 22 y 23 de embarazo.