¡Hoy cumplo 26 semanas! Y aunque esta semana va a ser un poco movidita, el viernes es fiesta aquí en Barcelona, así que tendré un fin de semana largo para descansar y disfrutar de maridín (este finde ha tenido que trabajar de noche y apenas hemos hecho nada).
Así ha transcurrido esta 26ª semana de embarazo:
- Asco a según qué comida
El pollo y el pescado sigo sin poder verlos. La ternera y el cerdo más o menos si, pero no me gusta mucho comer carne ahora, me resulta muy pesada. A veces me pregunto ¿y si jamás puedo volver a comer pollo?
- Pechos
Esta semana no he tenido molestias especiales ni nada, lo que he notado ha sido como que la areola estaba hinchada, es decir, no seguía la línea del resto de la teta. No sé, muy raro.
No he tenido calostro ni nada aún, y he leído que a algunas chicas sí que les sale durante el embarazo. Por un momento pensé “si no tengo calostro, o al menos yo no lo veo, el día del parto que yo querré enganchar a Bichito al pecho, ¿habrá algo ahí?”.
La verdad es que el tema de la lactancia da mucho de sí, pero me parece super interesante y tengo muchísimas ganas de experimentarlo. A ver si esta semana os cuento más.
- Flujo
Sin cambios. Una barbaridad. El caso es que necesito bragas nuevas, pero las únicas con las que estoy cómoda son las de Primark. A ver si hago un viajecito y me agencio bragas.
- Dolor de espalda
Bueno, esto es el cuento de nunca acabar. Esta semana apenas me he enterado de las lumbares, pero las caderas… uf, diría una retahíla de tacos solo pensando en mis caderas.
Además, ahora me despierto por las noches por el dolor agudo en las caderas, y con las piernas entumecidas. Y da igual como me ponga, que me levante o que haga el pino. Duelen. Duelen mucho.
El otro día volví del trabajo andando. Me encontraba bien y dije “venga va”. Error. Subí a casa llorando del dolor. Maldito músculo piramidal.
- Tránsito intestinal
Sigo sin queja. Aunque he tenido algún día que me ha costado más que otro, muy bien en general.
- Ganas de hacer pipí
Las ganas de hacer pipí aumentan cuando me pongo de pie. Supongo que es porque el peso de Bichito cae sobre mi vejiga, y claro, de repente parece que me meo más.
- Síndrome del túnel carpiano
Sigo a tope con este síntoma. Ahora es casi cada noche que me despierto así. Entre unas cosas y otras, podéis perder la cuenta de las veces que me despierto por la noche. Es increíble.
- Ardor
Esta semana he tenido más ardor que de costumbre, y ni la leche me lo ha mejorado. No es tan hardcore como para tomarme nada. Paso de tomarme cosas, porque puedo aguantarlo perfectamente y al rato desaparece. Pero ahí está.
- Antojos
Esta semana he seguido con las pipas. Me compré un paquete grande en Mercadona y he ido tirando. Pero nada más. Bueno, quizás chocolate. En algún momento me ha entrado una ansiedad suprema por comer chocolate con urgencia.
- Movimientos de Bichito
Estos días atrás algunos movimientos de Bichito me han hecho hasta daño. Estaba casi segura de que tenía los pies hacia abajo y la cabeza arriba, porque las patadas más fuertes las notaba como en el interior de mi vagina, muy curioso, por cierto, pero hace dos días me salieron dos bultos, uno a cada lado de la barriga en plan “cabeza y culo” y pensé que quizás se está recolocando.
No sé en qué semana se colocan definitivamente, pero este niño no para quieto, y a veces miro mi barriga y veo que está super deformada hacia alguno de los lados. La verdad es que me encanta sentirlo.
Podéis ver aquí los síntomas de la semana 25 de embarazo.