Hoy cumplo 35 semanas. Sólo faltan 35 días para salir de cuentas, pero mucha gente que me ve me dice que no voy a llegar a mi fecha. Estoy enorme, tengo un señor barrigón y me parece que mis vivencias con la diabetes gestacional y el supuesto peso de Bichito, hace que la gente se haga sus propias películas.
Últimamente (y me refiero a esta última semana), el embarazo se ha convertido en un suplicio, pues me estoy encontrando muy mal físicamente por culpa de la diabetes y de las hipoglucemias que me dan de forma diaria.
He escrito al enfermero, pues hasta el 19 no tengo cita con él y me dio su e-mail para que le consultase cualquier cosa. He llegado a un punto en que no puedo subir más dosis de insulina a pesar de que mi glucosa a la hora de comer sigue alta. Es un callejón sin salida. Yo no sé que más hacer.
- Asco a algunas comidas
Ha llegado un punto en el que también me da asco la única carne que podía comer, pero no por su sabor o textura, como ocurre con el pollo o el pescado, sino por repetición. Por estar comiendo lo mismo cada día.
Ahora lo sustituyo mucho más por queso o huevos.
- Pechos
Vuelven a dolerme ligeramente y los pezones a ratos están como más sensibles.
- Línea nigra
No se ha oscurecido más ni nada. La línea nigra sigue ahí, aunque a ratos me cuesta verla. Soy de piel muy clara y tampoco se ha pigmentado gran cosa.
- Flujo
Sin cambios en este aspecto. El jueves veo al ginecólogo que me hará la prueba del estreptococo este. No sé cuando me darán los resultados.
- Dolor de espalda
Parece que no he notado tanto dolor de espalda como antes. Sí de pelvis, y quiero entender que Bichito se está encajando, aunque lo más probable es que siga creciendo y haciéndose sitio.
- Tránsito intestinal
Todo bien. Todo correcto. Nada que decir sobre esto. Ni rastro del famoso estreñimiento del embarazo. ¡Y lo agradezco!
- Ganas de hacer pipí
Es increíble. Aunque tenga la vejiga medio llena, si me da una contracción de Braxton Hicks me meo todavía más. Por las noches he empezado a levantarme casi cada hora por esto.
Antes aguantaba más, pero es que ahora son las contracciones las que me presionan la vejiga y tengo que salir disparada de la cama.
- Nariz sangrante
Por suerte, ha dejado de ocurrir. Al menos durante esta semana, no me ha vuelto a sangrar así.
Quizás si me sueno los mocos el papel sale algo manchado, pero ningún río como el que salía antes.
- Contracciones de Braxton Hicks
Tengo muchas. Sobre todo cuando me muevo (me levanto del sofá, hago cosas de casa, voy paseando por la calle), y el problema es lo que comentaba antes, que me presiona la vejiga y aunque no haya casi pipí, me cuesta aguantar.
Normalmente, estas contracciones no duelen, únicamente hacen muchísima presión, pero esta semana he tenido varios episodios de dolor de regla acompañando a la contracción y creo que son las primeras contracciones que de verdad prepararán mi cuerpo para el parto.
Este jueves me hacen monitores (sí, muy pronto, lo sé, y no tengo ni idea del motivo, ya os contaré), así que a ver que tienen que decirme.
- Picor en la barriga
He vuelto a tener la sensación de rotura de piel en la barriga. Si unimos esto al dolor de pelvis, entiendo que mi barriga sigue creciendo.
El ombligo ya está a puntito de salirse del todo (y que feo es el maldito xD).
- Movimientos de Bichito
Mi niño se despierta conmigo cuando cambio de postura en la cama o cuando me despierto por las mañanas. ¿Es que escuchará la alarma?
Yo le voy hablando y contándole cosas aunque a veces me siento rara hablándole a mi barriga. Cada vez tengo más ganas de que salga de ahí y poder tenerlo en mis brazos.
Podéis ver aquí los síntomas de la semana 34 de embarazo.