Género: Comedia dramática.
País: Estados Unidos.
Duración: 106 minutos.
Dirección: Lisa Cholodenko.
Intérpretes: Annette Bening, Julianne Moore, Mark Ruffalo, Mia Wasikowska, Josh Hutcherson.
"Jules y Nic son una pareja que tiene 2 hijos: Laser y Joni , ambos concebidos por inseminación artificial. La tranquila vida familiar que llevan se verá alborotada cuando los chicos encuentren a su padre biológico, Paul, y lo inviten a formar parte de sus vidas."
Creo que la primera escena describe perfectamente el aire que la directora Lisa Cholodenko y el otro guionista Stuart Blumberg le aportaron a este cuarteto particular: una cena familiar en la cual todo transcurre apaciblemente (como cualquier otra familia), se discuten temas y se empieza a formar los carácteres de todos: Nic es la que lleva los pantalones en la casa y trae la comida a casa al final del día, aunque todo tiene que salir como ella quiere; Jules, por otro lado, es la que se queda en casa, es tierna y pacífica, un alma de la naturaleza. Joni es la hija de Nic, y es el vivo calco de su madre: con dieciocho años es muy inteligente, respetuosa y a un paso de irse a la universidad; Laser, el hijo de Jules, tiene quince años y está en plena adolescencia anárquica: hace lo que quiere, cuando quiere, apoyado en su amigo Clay, un tiro al aire. Esta atmósfera aparentemente perfecta cambiará cuando los chicos indaguen y descubran quién fue el donador de esperma; así, descubren que su padre es Paul, un tipo filántropo y naturista que no tardará mucho en atreaer a los cuatro integrantes de la familia de diversas maneras, algunas más profundas que otras.
La película no necesita jugadas tomas visuales ni nada: la dirección de Cholodenko es más que simplista y sólo le hace falta una historia bien contada y actores de talla grande; puede ser que se extralimite con el uso de una banda de sonido totalmente indie para resaltar la independencia del proyecto (aún asi, hay temas muy buenos) Hay más drama que comedia, pero el momento de la charla entre las madres y su hijo debido a que éste anduvo husmeando en su dormitorio es simplemente hilarante. Hay una sensación muy madura de acercarse a esta historia, y nada parece surreal, incluso las candentes y orgánicas escenas de sexo, que pueden sonrojar hasta el más pétreo espectador por su veracidad.
Calificación: A