Encuadre, enfoque, obturación, exposición, píxel... Son decenas los tecnicismos que envuelven al mundo de la fotografía. Cámaras y periodistas buscan las mejores imágenes por el mundo, buscando la esencia de divertidas situaciones, sucesos o majestuosos paisajes.
Siguiendo los pasos de estos exploradores, queremos enseñaros otro fácil taller creativo para que los más pequeños inmortalicen la percepción que tienen de su entorno, su vida y sus recuerdos.
Hoy día sólo con una instantánea podemos hacer inmortal lo que vemos. ¡Un gran paso para la humanidad! ¿No creéis? Todo fotógrafo sabe que las cosas se han puesto fáciles, ya no necesitamos tener conocimientos profundos para salir a la calle y recoger todo tipo de información visual, móviles con cientos de mega píxeles para hacer fotos de bolsillo, y cámaras con diferentes modos de disparo prediseñados por profesionales. Ya no pensamos si hay mucha o poca luz, o si fotografiamos una situación en movimiento. Todo es más fácil, ¡hasta los niños nacen con una cámara bajo el brazo!
Como por algún sitio tenía que comenzar, diremos que la creatividad de vuestros hijos es el pilar fundamental para el desarrollo de este taller.
Se define la creatividad como sinónimo de imaginación, ingenuidad, innovación, intuición, invención, descubrimiento, originalidad o visualización. Y este concepto, se asemeja mucho a esas palabrejas fotográficas de las que hemos hablado antes. Entonces, ¿podríamos decir qué la fotografía es creatividad en su estado puro? Cada uno que piense lo que quiera.
Como era evidente, ¿sabéis de qué va el taller? Desempolvad las analógicas y ponedle las pilas a las digitales, cámara en mano, salid a pasear por la gran ciudad o vuestro pueblo, id de excursión a ver monumentos o al campo, pasaros a la ornitología o fotografiar momentos familiares.
Dejad que vuestros intrépidos hijos sigan vuestros pasos y fotografíen el mundo desde sus ojos. Esta es la esencia del taller.
Pero esperad, seguid todos estos pasos antes y le mostraréis un universo escondido a vuestros hijos.
- Observa todo, no te dejes nada por el camino.
- Fuera el prejuzgar, porque las cosas son más de lo que ven los ojos. ¡Cualquier ecologista os dirá que un árbol no es idéntico al otro!
- Sigue tus verdaderas pasiones y encontrarás tu nirvana fotográfico.
- Buscar nuevas experiencias juntos, pues todas las cosas de la vida son una oportunidad para la expresión propia.
- Plantéale grandes preguntas y solucionarlas con una foto.
- Observar a las personas, tienen grandes experiencias que mostrarte.
- Perder la noción del tiempo.
Y sobre todo, salid de vuestra propia mente, a volar con los pájaros y a oler las flores con las mariposas, vivir lo que hacéis, crear, fotografiar, dejar rastro, y hacer que vuestros hijos hagan lo mismo.