Mi propia rosa

Publicado el 24 junio 2013 por Grettaespinosa

Eres responsable para siempre de lo que has domesticado.

Eres responsable de tu rosa…

-Soy responsable de mi rosa…

 -repitió el principito, a fin de acordarse.

Antoine De Saint-Exupéry

(Fragmento de El Principito)

Y yo tendré mi rosa, hecha con amor, con todo el amor de este mundo.

Será solo mía, y obtendré de ella lo que sea capaz de cultivar.

Si le siembro bondad, mi rosa será sin dudas harto benévola; si encono su espíritu, no podré sino esperar el peor de los maleficios.

Si le exijo poco, solo pereza tendré en pocos años; si, por el contrario, le enseño a amar la grandeza de valerse por sí misma, siempre me necesitará, pero sabrá crecer sola en jardines y selvas.

Por cada caricia que prodigue a mi rosa, seguramente cosecharé tres o cuatro para mí; por cada regaño sentado en la razón, haré de sus pétalos los de una flor de bien, rozagante de bondad.

Es mi mayor tesoro, y a la vez mi mayor reto.

Dejo de ser yo para convertirme en la tierna y dedicada domesticadora de mi rosa; dejé ya de ser yo, y ahora cuido de su semilla, le doy calor, alimento, y rezo por su bienestar.

Es solo mía, nadie podrá amarla más que yo; y, quien quiera domesticarla, tendrá que crear, cultivar y cosechar su propia rosa.


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