Mick Jagger cumple hoy 81 años, y ahí le tienen como una rosa, hecho un chaval, y eso que hace poco más de cinco años le operaron del corazón, y nada ahí sigue incombustible. Debe ser por aquello de su tremendo apetito sexual y todas las miles de relaciones que ha tenido en su vida (más de 4000 dicen) que hace que tenga esa salud de hierro, de hecho fue padre por octava vez a principios de 2017... con una mujer de 30 años (osea él es 44 años mayor). Implacable hombre de negocios, muy promiscuo, bailongo...Pero bueno, centrémonos en su carrera musical, que comenzara allá por 1962 con The Rolling Stones, una banda que al principio estaba muy influida por el blues muy negro, y que en los primeros años tenía a Jagger y Richards como principales compositores, pero también a Brian Jones, hasta la muerte de éste en 1969. Como he dicho alguna vez, la época dorada a mi juicio de los Stones, comprende los años en los que Mick Taylor formó parte de la banda, es decir, de 1969 a 1974. En cuanto a álbumes, mis favoritos siempre han sido, la trilogía Let it bleed, Sticky fingers y Exile on Main Street, más el Some girls de 1978 y Beegars Banquet de 1968.
En cuanto a su carrera en solitario, está compuesta por cuatro trabajos, aquel magnífico Wandering spirit de 1993, es para mí el mejor hecho por él, y después el Goddess in the doorway de 2001, siendo sus dos trabajos ochenteros de menos calidad general (She's the boss de 1985 y Primitive Cool de 1987). También participó en el proyecto Superheavy, junto con el guitarrista de Eurythmics Dave Stewart, que de heavy tenía muy poquito, aquello tiraba más al reggae que otra cosa.Como todo el mundo sabe va a hacer tres años que nos dejó Charlie Watts, pero Mick, Keith Richards y Ron Wood siguen con la maquinaria dando conciertos hasta que el cuerpo aguante.
Celebramos en homenaje con el tema Sweet sounds of heaven junto a Lady Gaga el año pasado.