Altos dirigentes de la ONU han expresado su horror por el naufragio registrado el 25 de julio pasado, en el que presumiblemente murieran 150 personas, entre ellas mujeres y niños. Se trata de la peor tragedia en el Mediterráneo en lo que va de año ante la indiferencia de los países mediterráneos. Varios dirigentes de diferentes partes de las Naciones Unidas pidieron que se reanudasen las operaciones de búsqueda y rescate de migrantes y refugiados. Sus testimonios señalan que en la nave podían viajar unos 250 migrantes y refugiados antes de que zozobrara debido a fallo del motor. En un tuit, Antonio Guterres, Secretario General de la ONU, declaró estar “horrorizado” por la tragedia e hizo un llamamiento para “la creación de rutas seguras y legales para los refugiados y migrantes” que huyen de sus países. El Alto Comisionado para los Refugiados, Filippo Grandi, y la directora ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Henrietta Fore, se hicieron eco de las palabras de Guterres y pidieron el cese del arresto arbitrario de refugiados y migrantes que se encuentran retenidos en centros de detención. Por su parte, un portavoz de la Agencia de la ONU para los Refugiados reiteró durante una rueda de prensa en Ginebra que la pérdida de vidas muestra “la urgente necesidad” de que los Estados reanuden las operaciones de búsqueda y rescate y “ayuden a aliviar el sufrimiento de los miles de refugiados y migrantes que están atrapados en el conflicto de Libia”. La tragedia sucedió dos días después de que, en París, se alcanzase un consenso por la Unión Europea para evitar más muertes de migrantes y refugiados libios en el Mediterráneo. “El statu quo, donde las operaciones de búsqueda y rescate a menudo se dejan a ONG o a embarcaciones comerciales, no puede continuar. Se necesita una operación de búsqueda y rescate de la Unión Europea, similar a los programas que hemos visto en los últimos años”, aseguraron en un comunicado. Y, en Ginebra, el portavoz de ACNUR reiteró la solicitud de la agencia para obtener ayuda adicional, como nuevos lugares de reasentamiento y buscar rutas seguras fuera de Libia para las personas vulnerables; así como que se adopten mayores medidas para arrestar y procesar a traficantes de personas.
Por su parte, Óscar Camps, director de la ONG Proactiva Open Arms, instó el lunes al Gobierno de Pedro Sánchez a solicitar a la Comisión Europea que todos los países miembros asumiesen sus labores de salvamento marítimo y que dejen de bloquear sus puertos. En declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Europa Press, Camps explicó que esta petición tenía que ser realizada por un Estado miembro para que la Comisión iniciase los contactos con países como Italia o Malta. “Comparto que tanto Italia como Malta tienen que asumir su responsabilidad. Estamos agotando todas la vías ordinarias y legales para conseguirlo. Si España se anima a acompañarnos al tribunal de Hamburgo – Tribunal Internacional del Derecho del Mar– podremos denunciarles por el incumplimiento, pero no podemos ir solos. Lo que no podemos hacer es bloquear a los barcos”, se lamentó el director de la ONG. El mismo lunes, el Gobierno italiano superó la moción de confianza del Senado por su decreto para multar a las ONG que rescaten en el Mediterráneo. La votación se saldó con 160 votos a favor, 57 en contra y 21 abstenciones, según La Repubblica, diario italiano que informó que varios de los presentes gritaron “vergüenza” tras el proceso. Para Camps, “aprobar algo así significa” que, “lamentablemente” se “declara la guerra a los Derechos Humanos y a la pobreza”. El decreto, redactado por el ministro del Interior, Matteo Salvini, fue aprobado en junio y contempla que los barcos privados que ignoren las órdenes para no entrar en aguas territoriales del país europeos tendrán que pagar entre 10.000 y 50.000 euros al llegar a puerto. Asimismo, daba al Ministerio del Interior el poder para emitir estas órdenes, que hasta ahora estaban en manos del Ministerio de Transporte e Infraestructuras. Así, las multas deberán ser pagadas por el capitán, el operador del barco o el propietario del mismo. Además, aquellos que violen en varias ocasiones esta medida podrán sufrir la incautación de la embarcación. El ultraderechista Salvini, quien pedía el pasado jueves nuevas elecciones en Italia y daba por roto el gobierno, recalcó que el decreto “da más poderes a las fuerzas del orden, más controles fronterizos y más hombres para arrestar a miembros de la mafia y la Camorra. Doy las gracias a los italianos y a la santísima Virgen María”, manifestado el ministro de Interior. Salvini ya aplaudió en junio la aprobación del decreto y señaló que se trataba de “un paso adelante para la seguridad del país”, al tiempo que se mostró “absolutamente seguro” de que la medida “cumple” con todas las leyes nacionales e internacionales. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), casi 700 personas han muerto en el Mediterráneo en lo que va de año, más de 400 de ellas cuando intentaban alcanzar las costas italianas.
Las personas que intentan ayudar en el drama que se vive en el Mediterráneo se encuentran con, cada vez más, obstáculos para socorrer a los que intentan llegar a Europa. Así lo explicaba Helena Maleno, periodista e investigadora especialista en migraciones y trata de seres humanos, y Anabel Montes, jefa de misión y patrona de embarcación de la ONG ProActiva Open Arms, en el encuentro ‘El naufragio de los Derechos Humanos en el Mediterráneo’, moderado por Ana Pardo de Vera, directora de 'Público'. “No estamos salvando vidas, estamos devolviéndoles su derecho a la vida, que se lo estamos quitando”, afirmó Maleno al hablar sobre las “industrias de la guerra y de la esclavitud” que promueven una huida masiva. Añadió que toda esta situación se basaba en “un sistema de impunidad porque no hay ninguna sentencia que responsabilice esas muertes”. Anabel Montes remarcó la criminalización que se ha hecho de las labores de rescate y la persecución que sufren por mostrar lo que está pasando. “Nos quieren echar del Mediterráneo porque molestamos. Lo que pasa en el mar no tiene ni idea nadie, y por ello utilizan la difamación y la política del miedo”, explicó Montes para hablar del aumento de un mensaje de racismo y xenofobia. “Las mujeres ya dan por hecho que por el camino las van a violar. Es un peaje, un precio que tienen que pagar para llegar a Europa”, afirmó Maleno. Y explicó que el problema está en el sistema de acogida, que no es capaz ayudar a estas mujeres y poder parar la violencia a la que son sometidas. Ambas coincidieron en la ineficacia de las instituciones a la hora de establecer políticas eficaces en las fronteras. “Cada vez nos encontramos con más trabas”, afirmó Montes, quién también explicó la situación en el mar. Libia, según ella, no tiene un cuerpo preparado para salvar a las embarcaciones que se hunden, pero aún así hay un grupo armado al que se denomina “guarda costas libio” y al que Unión Europa acepta. “Son los mismos que nos han disparado dos veces y los mismos que nos amenazaron de muerte si no les devolvíamos a las mujeres y a los niños que habíamos rescatado”, explicó.
“¿Qué le pasa al Gobierno de Pedro Sánchez que se reúne con colectivos sociales y ecologistas y en cambio guarda silencio sobre las personas que buscan acogidas en medio de nuestro mar? –escribe Antonio Casero, de acuerdo con la PLATAFORMA BENVINGUTS REFUGIATS MENORCA– ¿Qué buscan sólo el relato y callar con la praxis?”.
Las 121 personas rescatadas por el Open Arms cumplen catorce días y catorce noches noches atrapadas en alta mar. La tripulación trata de no crear expectativas entre los migrantes a bordo, pero explicar la realidad no resulta fácil: ningún Gobierno europeo ha movido ficha para resolver su situación. Ante el cierre de puertos de Malta e Italia, el Gobierno español (Estado de bandera del buque) ha instado de manera pública a la Comisión Europea a gestionar una solución, pero se resiste a activar el procedimiento de forma oficial. “La Comisión no ha recibido hasta ahora ninguna solicitud de coordinación y, por lo tanto, no ha iniciado contactos ni esfuerzos de coordinación”, reiteran fuentes oficiales de la institución comunitaria a Eldiario.es. “El pasado lunes, una portavoz de la Comisión explicó en rueda de prensa que, para poder impulsar la negociación de un posible acuerdo europeo que permita el desembarco en los puertos más próximos (Malta o Italia), era necesaria la solicitud formal emitida por un Estado miembro. Seis días después del rescate, ningún gobierno europeo la había tramitado. Tampoco España, cuyo Ejecutivo insiste en apuntar a la Comisión Europea como responsable de una solución que no llega. Ante tal inacción, Open Arms envió el pasado martes una carta a Pedro Sánchez en la que solicitaba la puesta en marcha del mecanismo europeo de distribución de rescatados. En la misiva, Óscar Camps, líder de la ONG, aseguraba haber agotado los canales ordinarios para conseguir el permiso de desembarco en los puertos más próximos (Italia y Malta) e instaba al Gobierno español a facilitar el trámite requerido por Bruselas”. El Ejecutivo no respondió a su requerimientoy se limitó a hacer constar unas declaraciones realizadas el martes por José Luis Ábalos en las que mostraba una aparente falta de voluntad para interceder en Bruselas con la finalidad de acelerar el desembarco de los 121 rescatados. “La operación de salvamento se produjo, parece ser, en aguas libias, de responsabilidad libia. Pero, en todo caso, el primer puerto seguro, si se descartaran los africanos, serían otros países europeos. Es a partir de ahí, de la recepción, donde la Comisión debe proceder al reparto”, expresaba en Pamplona el titular de Fomento. “Es muy importante que cada uno asuma su responsabilidad de acuerdo a la legislación internacional. Al final, no va a haber ninguna política que pueda encajar este fenómeno que tiene dimensiones. Apelamos a que la Comisión Europea intervenga en este sentido”, insistía Ábalos.
Gabriela Sánchez escribe en Eldiario.es sobre el nuevo giro de Sánchez en inmigración: de “impulsar” un mecanismo de desembarco a negarse a activarlo para el Open Arms. Recuerda que, el 14 de agosto de 2018, 141 migrantes acumularon tres días a bordo del buque Aquarius. Fue el primer rescate del emblemático barco humanitario, después de la operación de salvamento de 630 personas que finalizó con un despliegue humanitario en el puerto de Valencia. “En esta ocasión, su desenlace sería distinto: un acuerdo entre varios países europeos para repartir la acogida de los recién llegados empuja a Malta a permitir su desembarco. Pedro Sánchez no tarda en atribuírselo como un éxito propio. Asegura que esperaba convertir este sistema en ‘una solución sistemática’. España ha coordinado un acuerdo pionero con seis países para distribuir la acogida de las personas del #Aquarius. Ha sido posible gracias al camino que emprendimos en junio, impulsando una salida común y solidaria a los flujos migratorios. España acogerá a 60 personas, anunciaba el presidente del Ejecutivo a través de Twitter. Posteriormente, Sánchez defendió que el acuerdo no se quedase en una solución temporal. “Espero que sea sistemática”, incidió entonces. Casi un año más tarde, 121 migrantes cumplen su séptima noche en el Open Arms. Ningún Estado miembro ha activado las negociaciones que permitan un pacto europeo para acelerar el desembarco. Para que la Comisión Europea pueda coordinarla, explican fuentes comunitarias, un gobierno comunitario debe solicitárselo por los canales oficiales. El Gobierno español se niega a hacerlo. Y aquella iniciativa que Sánchez vendió como un logro nunca llegó a sistematizarse. España añade pegas a la propuesta franco-alemana que pretendía afianzar un mecanismo europeo de desembarco predecible. Tras cada rescate de migrantes en el Mediterráneo Central, continúa reinando la improvisación. “No hemos recibido ninguna petición de coordinación sobre el desembarco de las personas que están a bordo del Open Arms”, repetía el pasado miércoles un portavoz de la Comisión Europea. “No tenemos por qué hacerlo”, respondió la vicepresidenta del Gobieno español, Carmen Calvo.
“Una vez más, se desata la polémica tras un rescate en el mar. De nuevo, decenas de personas cumplen una semana atrapadas en un buque sin un puerto seguro donde desembarcar. ‘Esta situación prueba otra vez nuestra posición: es muy necesaria la creación de una solución predecible y sostenible para los desembarcos’, añaden desde la Comisión Europea, en referencia a la propuesta de un mecanismo temporal de distribución de los migrantes rescatados en el Mediterráneo central. El proyecto, impulsado por Francia y Alemania, continúa en proceso de negociación por parte de los Estados miembros. A finales de junio, el presidente francés Emmanuel Macron anunció la participación de al menos ocho países comunitarios. Entre los participantes confirmados no se encuentra España, indicó un portavoz de Exteriores a Europa Press. “Todos los migrantes rescatados en el Mediterráneo, independientemente de por quién hayan sido rescatados, deben entrar en la valoración de la relocalización en Europa”, decía el ministro del Interior el pasado febrero, tras una de las reuniones informales convocadas en el seno de la Unión Europa. El Ejecutivo también ha mostrado su oposición a que España tenga que asumir la acogida de migrantes rescatados por ONG en otras partes del Mediterráneo, cuando también cuenta con fronteras exteriores y ejerce operaciones de rescate a través de su servicio público de Salvamento Marítimo: “España es un país que cumple con sus compromisos internacionales y no puede ser que el país más solidario resulte perjudicado", justificó Grande-Marlaska. No obstante, la Comisión Europea ha solicitado en varias ocasiones a todos los Estados miembros unirse a los acuerdos temporales para responder a las situaciones de emergencia generadas cada vez que un barco humanitario rescata a personas migrantes en el Mediterráneo Central desde el cierre de los puertos italianos y malteses. Un mecanismo que evitaría las discusiones despertadas entre los Estados miembros tras cada rescate, como la desatada estos días después de las operaciones del Open Arms que salvaron la vida a 121 personas. Y el pasado martes, el capitán reunió a los pasajeros en la cubierta para rogar su paciencia. “No sabemos hasta cuándo vamos a estar aquí. Hasta mañana, pasado, o vamos a tener que permanecer dos días más. Necesitamos ser fuertes para ganar esta guerra. Llegaremos a un puerto europeo”.
Anabel Montes, jefa de misión de Open Arms, explica en un vídeo que “la política no puede estar por encima de las personas” y reitera la necesidad de recibir la autorización de atracar en un puerto, “siguiendo los convenios y acuerdos internacionales y sobre todo haciendo referencia a la Carta de los Derechos Humanos, con especial énfasis en el Derecho a la Vida”. Montes afirma que, con el paso de los días, es más complicado explicar a las personas socorridas “por qué no pueden desembarcar, por qué no pueden ser llevadas a un puerto seguro donde su vida no corra peligro”. Apunta a que “con el paso del tiempo, las situaciones de ansiedades, de nerviosismo van aumentando” y que la tripulación no desea que ·llegue el punto en el que haya una situación” que no puedan controlar. Salvini volvió a acusar a la organización humanitaria de usar los rescates como “provocación” para llevar a los migrantes a Italia. El Parlamento italiano acaba de aprobar un decreto impulsado por Salvini que permite requisar las naves de las ONG que violen la prohibición de entrar en aguas italianas y que prevé multas de hasta un millón de euros.
“¿En qué se ha convertido Europa?”, se preguntaba el pasado jueves Jordi Évole en Twitter. “121 personas rescatadas por Open Arms y, tras siete días, ningún país de la Unión Europea ofrece puerto”. Así comienza un vídeo protagonizado por el que fuera presentador de Salvados (la Sexta) que, tal y como él mismo dice, debería “avergonzar” a la UE y llevarles a tomar una decisión para salvar las vidas de los migrantes rescatados y atrapados (sin puerto) en el buque español Open Arms. “No sé cómo le vamos a explicar a esas 121 personas rescatadas que van a bordo del Open Arms que, después de siete días, no hay ningún puerto seguro de la UE donde puedan ser desembarcadas”, dice Jordi Évole. “Dejen de hacernos pasar vergüenza. A los que estáis en el barco –continúa el periodista de la Sexta– tanto a la tripulación como a los tripulantes, mucho ánimo”. El vídeo termina con un mensaje directo a aquellos responsables de la UE que, todavía, están a tiempo de salvar a todos estos migrantes del Open Arms.
“Ya sé que decir esto desde lejos es poco, pero es lo único que nos queda. Por lo menos, enviaros toda la fuerza que nos queda a los que estamos en tierra”. Antes de llegar a ningún puerto, el Open Arms se encontró con otras 39 migrantes en el mar que se unieron a los 121 que ya llevaba. Óscar Camps, el fundador de Open Arms, compareció ante los medios de comunicación para hacer un llamamiento y denunciar la situación de abandono en el Mediterráneo. “Esta Europa desmemoriada no permite que estas personas, cuyas vidas corren peligro, puedan utilizar vías seguras [para llegar al continente]. Si no tienen vías seguras lo que está haciendo Europa es entregar todas esas vidas al crimen organizado, cuando simplemente podrían utilizar un derecho que tienen”. Pidió “un lenguaje adecuado” para referirse a los rescatados. “En aguas internacionales no hay migrantes”, declaró en rueda de prensa, a la que también acudió el actor y activista estadounidense, Richard Gere. Camps afirmó que Malta había accedido a que desembarcaran las 39 personas recién encontradas en su puerto. No así las otras 121 que llevan más de diez días esperando ser acogidas. “Esto ha generado un serio problema de seguridad a bordo. El nivel de ansiedad de estas personas es insostenible”, advirtió.Y de los migrantes y refugiados en el Mediterráneo, pasamos a Mallorca, donde los reyes, lejos de perderse o hundirse en ese mar, acostumbran a desplazarse para promocionarse durante el verano. “Si Villarejo estuviera en Marivent”…, tituló Aníbal Malvar el pasado miércoles en Público. “Pedro Sánchez lleva tanto tiempo repitiendo lo mismo a todo quisque que, a lo mejor, en su despacho con el rey en el palacio de Marivent se le suelta el automático: ‘Majestad, le ruego que se abstenga para no depender de nacionalistas y bla, bla, bla’. Como nuestro nuevo rey no es nada campechano ni ocurrente –lo dicen los periodistas destinados en Casa Real–, seguramente contestará con alguna frase institucionalmente frugal y distraída. Es lo que tiene colocar las reuniones de más alto nivel a la hora del vermú. Lo peculiar de esta reunión es que se produce entre un presidente en funciones dedicado a mendigar votos blancos y un jefe del Estado que acaba de quebrantar frívolamente la imparcialidad que le exige la Constitución. Porque es frívolo hacer valoraciones políticas durante un posado fotográfico con las niñas y la reina, coño. Y, además, te arriesgas a que Letizia te contradiga en un arranque de espontaneidad, que buena es ella (…) Por su parte, Pedro Sánchez acude a la cita con un halo de majestad que solo observan él mismo y sus más afamados pelotas. El rey de los 123 liliputienses en minoría absolutista va desnudo, sin un solo aliado, a tan varonil cumbre. Pero ya se le ha visto salir airoso de otras muy procelosas situaciones. Por su instinto de supervivencia y su talento para la inacción vocacional, Sánchez empieza a parecer abducido por el fantasma de Mariano Rajoy, que vaga por la Moncloa con un Marca amarillento debajo del brazo y la resaca eterna de aquellas ocho horas de moción de censura que pasó bebiendo whisky en el restaurante Arahy, mientras en su escaño gobernaba el bolso de Soraya Sáenz de Santamaría. No sería de extrañar, dada la relajación con que tomamos en España la panoplia esa de la separación de poderes, que en esta reunión vacacional Sánchez le rogara a su preciosa majestad que intercediera ante Albert Rivera y para que facilitaran la investidura. El vasallaje borbónico de ambos políticos de nuestra derecha está sobradamente documentado. Inolvidable el discurso de Casado el pasado año con motivo de la junta nacional del PP: ‘Cuando abrimos un hospital o abrimos un colegio estamos diciendo viva el rey; cuando pagamos las pensiones o pagamos un subsidio de desempleo, o abrimos kilómetros de AVE o de carreteras o un aeropuerto, también decimos en gran medida un viva el rey; cuando nuestro sistema de trasplantes salva una vida o cuando se atiende a un dependiente también se dice viva el rey’, y le faltó añadir que cuando se encuentra un semáforo en verde, prescriben los delitos de los tuyos o te funciona un laxante hay que enfervorizar los vivas al rey. Aseguran los que saben de estas palaciegas intrigas que Juan Carlos I estuvo siempre más cerca de Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero que de José María Aznar y M. Rajoy. O sea, que nuestra borbonía congracia más con los supuestamente republicanos socialistas que con los legitimadores incondicionales de la herencia monárquica de Franco. Sería interesante sabe si sigue siendo así. Qué pena que no ande suelto estos días, con el morbo que nos podría dar a los españoles de izquierdas escuchar una grabación pirata de este despacho del presidente con el rey. Al fin y al cabo, el viejo comisario encarcelado ha sido quien más ha hecho en España por aplicar las leyes de transparencia. A ver quién tiene ovarios a negarlo”.
Karina Sainz Borgo titula en Vozpópuli: “El rey recibe… ¡Qué nivel, Marivent!”. Un artículo que termina: ·Así llegó el socialista a Mallorca: provisional y remendón. Dice Sánchez estar dispuesto a reunirse con media España. Lo hace, sí: en modo pasarela, una especie de sistema que audiencias. No habrá elecciones, insiste, pero con Iglesias, ni a la esquina. No se mueve una hoja en el Palacio de Marivent, pero el rey recibe, porque le toca. Traga grueso el jefe del Estado, y no como el juego ni el micuit. Se le atraganta todo al monarca, hasta su esposa, una consorte de sonrisa estreñida, casi tanto como los apoyos a una legislatura con la que el muñeco de Moncloa marea la perdiz. Erre que erre, ¡Santa María… Chivite! Iba en vaqueros Felipe VI cuando insistió en su versión palaciega del no es no. Ni vacaciones ni ostias: ¡eah, pues, gobierno… y cuanto antes mejor! Aquí que cada quien achique su escaño. El problema, don Felipe, no era el posado sino el pasado, que a la Corona le tienen ganas y a este paso las puntas de la diadema acaban romas. Que ni pinchan ni cortan. El rey recibe. ¡Qué nivel, Marivent”.
“Elecciones monárquicas” titula David Torres el mismo día y en el mismo periódico: “Como cada agosto, los españoles descubrimos que seguimos siendo monárquicos gracias a las fotos veraniegas de la familia real. Si no fuese por esas estampas bucólicas de los borbones en Marivent, con Felipe y Letizia posando sonrientes junto a sus hijas, hasta podríamos pensar que somos republicanos. Pero la diferencia entre una república y una monarquía son las fotos, especialmente las fotos veraniegas. Un presidente, como Donald Trump por ejemplo, da la impresión de estar de vacaciones incluso cuando está trabajando, mientras que un rey, como Felipe VI por ejemplo, parece que está trabajando hasta cuando empieza las vacaciones. De hecho, el curro en la Casa Real se va amontonando de tal modo que a veces incluso el propio monarca se equivoca en estas espinosas cuestiones de protocolo y se pone a opinar fuera de fecha sobre la formación de gobierno, una salida de tono que le han afeado desde republicanos convictos y confesos hasta monárquicos de lo más recalcitrante. Primero, porque no está bien que un rey haga horas extra y siga trabajando con el bañador puesto; segundo -dicen-, porque su trabajo en lo que respecta a estas cuestiones consiste principalmente en callarse. Hay quien sostiene que es el rey quien debería presentarse a unas elecciones democráticas, sin reparar en que un borbón las elecciones las ganaría con la gorra, sin despeinarse, como si fuesen unas regatas. ‘Lo mejor es encontrar una solución antes de ir a elecciones’ dijo Felipe VI, quien, al igual que cualquier español, ya está cansado de ir y venir con la papeleta y de que sus representantes hagan el tonto sin ponerse de acuerdo por un quítame allá estos sillones. A lo mejor la solución también pasa por poner un rey suplente en período vacacional, un rey en funciones, lo mismo que se reemplaza al portero en una comunidad de vecinos. De momento, la vacante la podría cubrir Revilla, quien no sólo da la nota campechana sin desentonar sino que además llevaría sus propias anchoas a las recepciones. Pensamos que la república es un modelo de gobierno mucho más adelantado que la monarquía y a lo mejor resulta que estamos equivocados: de ahí que haya tantas monarquías parlamentarias en Europa y de que los romanos, hartos de guerras civiles, decidieran cambiar la república por un imperio que les dio grandes momentos con Octavio, Trajano y Adriano, y otros no tan grandes, aunque igual de divertidos, con Tiberio, Nerón y Calígula. Puede que, en Estados Unidos, también se lo estén pensando y acaben proponiendo una dinastía, lo cual no sería muy difícil teniendo en cuenta que ya han padecido a los Kennedy o a los Bush y que a Trump únicamente le falta entrar en el Senado a caballo. Lo explicaba Bob el Inglés en Sin perdón, mientras limpiaba el tren de chinos, cuando decía entre chino y chino que los estadounidenses deberían elegir un rey y dejarse de presidentes, porque abundan las decapitaciones, pero no hay constancia histórica de que nadie haya disparado jamás contra un rey: la visión de la realeza haría temblar la mano del pistolero hasta hacerle fallar el disparo. En Marivent les tiembla la mano hasta a los fotógrafos”.
El colectivo independista Arran publicó un vídeo en el que critica el alquiler de coches a turistas en Mallorca. En la grabación, se ve cómo hacen pintadas, pegan carteles, pinchan ruedas y rompen los cristales de la luna delantera con un martillo a varios vehículos. En su web @Arran_jovent, hace constar los más de cien mil coches de alquiler turístico que hay en la isla de Mallorca provocan “saturación, insostenibilidad, contaminación y convertir la ciudad en un aparador turístico. ¡El jovent passem a l'ofensiva! Con esta campaña Arran ya ha llevado a cabo otras acciones, como el despliegue de una pancarta en La Pedrera o encadenarse en el Consorcio de Turismo de Barcelona. En su cuenta de Twitter, Cort ha condenado los actos vandálicos que han sufrido los vehículos por parte de este colectivo Arran y ha defendido que los turistas “son bienvenidos en la ciudad. Trabajamos por la convivencia y el equilibrio entre turistas y residente”, ha añadido. Por su parte, el grupo político Vox, ha exigido al tripartido del Gobierno balear (PSIB-PSOE, Més per Mallorca y Podemos) y a Palma que condene “sin ninguna excusa o tibieza” el terrorismo de la entidad separatista Arran. Ellos lo llaman “acción antiturismo” cuando para Jorge Campos, líder de Voz Baleares, “se trata de kale borroka, la repetición en Palma de lo durante años hizo ETA en el País Vasco. Armengol, Hila... Todos ellos deben posicionarse frente a al terrorismo de Arran. No es casual que esto suceda cuando también han atacado nuestra sede en Palma. El Pacto debe dejarse de complicidades. Espero y pido que Fiscalía investigue los hechos y se castigue a los culpables”. Campos ha lamentado que “Armengol haya pactado con los que defienden a estos salvajes. Así es, sino que explique sus subvenciones a Valtonyc, a la OCB, su imposición del catalán, su pasteleo con el separatismo y con los xenófobos que culpan a los turistas de todos los males. Sí, hay que decirlo claro: Arran son unos racistas, verdaderos nazis a los que algunos de los que nos gobiernan aplauden”.
Fotomontajes, imágenes y frases sorprendentes de esta última semana:
Antonio Hernández Alonso nos recuerda en esta fotografía: “Quedaos con esta cara. Gobernador militar de Madrid en 1939. Firmó y ordenó el fusilamiento de las 13 Rosas. Su nombre: EUGENIO ESPINOSA DE LOS MONTEROS. ¿Os suena de algo? Su nieto hoy tiene Vox en el Congreso de los Diputados”.
El Decreto de la vergüenza en dibujo. Cuando una imagen vale más que mil palabras.
El humor en la prensa de esta semana: Peridis, Manel F, Pat, Vergara, J. R. Mora, Eneko, Atxe, Enrique, Javirroyo…
Pep Roig, desde Mallorca: Náufragos, Bochorno (climático) persistente, El extremo manda, Los tramposos, Perseverantes, Alosuyo, Como pollo sin cabeza…