Bajo el nombre de Miko ya había grabado algunos temas desde el 76, pero fue en el 84 cuando pego el pepinzao en las listas y en las listas de baile de toda Europa.
El tema tenía todos los ingredientes del Italo.
Bailable, melodía pegadiza y sonidos disco inyectados con tecnología.
Así que barrió en aquel año por todos los sitios.
No paraba de sonar, de bailarse, de salir en cualquier Max Mix que se preciase.
Y a dia de hoy es verdad que suena desfasado pero eso no implica que a uno le siga gustando y se lo pase de miedo cuando lo pone.
Y también paados los años me reafirmo más en mi idea de que el Italo fue un buen estilo en sus primeros cuatro o cindo años. Después empezó la decadencia lógica en un estilo que lo único que pretendía era que bailases y que lo pasases bien.
Y eso lo cumplió a la perfección.