Mini Meditaciones y Mantras Multiuso

Publicado el 17 junio 2016 por Lola Lemans @lemanslola

Hace bastante tiempo que no posteo en el blog, y eso quiere decir dos cosas:
– que estoy hasta las orejas de trabajo
– y que me lo estoy comiendo todo

En mí el estrés y el agobio van de la mano con los atracones. El levantarme exhausta, ocuparme de los demás y trabajar hasta caer rendida, para volver a empezar a la mañana siguiente. Y los fines de semana son todavía peores.

Anduve buscando alguna técnica antiestrés, alguna meditación que me ayude a enfocar y callar la mente, para ser más efectiva en el trabajo y terminar todo antes, a ver si consigo un ratito para mí de vez en cuando. Y controlar la desesperación que me lleva a comer por aburrimiento, tristeza, nervios, enojo, en fin, cualquier otra razón fuera de “hambre”.

Así fue que durante mi último viaje a Buenos Aires, caí muy entusiasmada en un seminario en plan “programa de la felicidad”, ofrecido por una fundación de origen hindú que es extremadamente popular en Argentina. Prometen una técnica de respiración que es supuestamente muy beneficiosa a nivel físico, emocional, mental y espiritual, y tan poderosa es que ya antes de empezar el curso tuve que firmar un acuerdo para no enseñar la técnica a nadie, porque solamente los entrenadores certificados pueden hacerlo.

Seguí el curso con interés y me calmó bastante, fueron cinco días de vegetarianismo, paz y amor. La técnica de respiración me resultaba muy difícil de seguir, pero no me importaba porque la voz del guruji me sedaba tanto que a la mitad de la meditación me quedaba dormida.

Terminé el curso dispuesta a 40 días de práctica de la respiración cada mañana, muy entusiasmada porque se formó un grupito de whatsapp para darnos ánimo, y yo estaba muy comprometida. Pero la respiración me resultaba una tortura: me distraía contando las repeticiones, no me salía el ritmo, me cansaba y me resultaba terriblemente incómodo. Probé cambiar un poco la técnica, reduciendo las repeticiones: el entrenador me dijo que no cambiara nada, que debía hacerse tal cual se había enseñado.

Hasta que a la semana, cuando yo no paraba de quejarme porque detestaba la espantosa técnica de respiración, el trainer no tuvo mejor idea que decirme que estaba “demasiado tensa” a la hora de meditar, y que me convenía “hacer yoga o salir a caminar un rato antes”… ¡para relajarme! ¡Impresionante! Busco una técnica para relajarme y me dicen que me relaje antes de relajarme, ¡¿¡¿peeeerrrdónnnn?!?!

Me sentí un fracaso total… ¡no sirvo para las prácticas espirituales!

Entonces recordé los tres principios que me funcionan a la hora de adoptar un nuevo hábito:

1) Me tiene que gustar
Tiene que ser placentero, agradable, sencillo, que fluya sin esforzarme ni torturarme.
Esta práctica era una obligación y no el momento de autocuidado, replenación y tiempo para mí que andaba buscando.

2) Tiene que ser gradual
Una repetición por vez, un minuto por vez, algo tan simple y tan cortito que no tenga excusas para no hacerlo. Y con el tiempo, ir agregando un poquito más casi sin darme cuenta. Esta práctica tomaba más de 20 minutos de principio a fin, me costaba mucho hacerlo de una vez

3) Tiene que funcionar
Me tiene que relajar, caramba… no dejarme más enojada y frustrada que antes. Creo que no es mucho pedir.

Así he creado una Mini-técnica Exprés de Meditación Instantánea para Mujeres Ocupadísimas, ¡y aquí te la presento!

Varias veces por día vas a parar un momento lo que estés haciendo, cerrar los ojos y respirar profunda y lentamente:
– inhala y cuenta 1, 2, 3
– retén el ahire y cuenta 1, 2, 3
– exhala y cuenta 1, 2, 3, 4

Al exhalar repite uno de estos 3 Mantras Mágicos Multiuso, según lo que andes necesitando en ese momento: OOOOOMMMM, AAAAAMMM, IIIIMMMM

OOOOMMM: Este mantra es muy útil a la hora de la culpa.
El mantra completo es OOOOOOOMMMMMMMerezco. Lo merezco.
Usalo para meditar cuando estés entre responder un email más o parar para salir a comer (¡parar para descansar! ¡OOOOOOMMMerezco!).
O a la hora de maquillarte para salir a cenar con tus amigas mientras tu hijo se queda mirando la Eurocopa por la tele con el padre y piensas… ¿no debería yo leerle un cuento y ponerlo a dormir antes de salir? (¡vamos ya! ¡que se encargue el padre! ¡es una noche nada más! ¡OOOOOMMMMerezco!)

AAAAMMM: Repetir cada mañana al despertar, cada vez que te mires al espejo, cada momento posible, porque es milagroso
El mantra completo es AAAAAMMMMome. Amome. Me amo.
Amo mi cuerpo tal cual es. Amo mi vida tal cual es.
Ya hemos desperdiciado demasiada energía insultándonos y criticándonos. Y no ha funcionado.
Por qué no intentar algo diferente esta vez: empezar por amar tu cuerpo y tu vida tal cual son. Aquí. Hoy. Ahora.
Y si hay algún cambio para hacer, que sea desde el amor y el auténtico deseo, alineado con el alma y el corazón, de honrar al cuerpo y la vida buscando sentirnos de la mejor manera posible.

Lo que me lleva al IIIIIMMMM, para neutralizar esos deseos superficiales de impresionar a los demás o ceder a presiones externas que no nos hacen mejor personas: IIIIIIMMMMportamerd!! Me Importa Una Mierda.
Mantra exorcisante para todo pensamiento negativo que de vueltas en tu cabecita loca: IIIIIMMMMportamerd!
Cualquier cosa que haya pasado en el pasado y que ya no puedas hacer nada, no la sigas alimentando, sácale el poder meditando IIIIMMMMportamerd!
Cualquier problema del trabajo del que nadie se va acordar de aquí a un mes: IIIIIMMMMMportamerd!
Esas fotos de modelos con piernas de 5 metros mientras las tuyas son jamones… IIIIIMMMMMPortamerda!
Comentarios que te hacen sentir inadecuada… IIIIIMMMMMPortamerda! (recuerda que “Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento” – Eleanor Roosevelt)

Y de a poquito, con breves de estas meditaciones durante el día, me voy sintiendo mejor.

Tanto mejor que he vuelto a escribir un post en el blog, ¡mira tú!

Porque al final… ¿levantarme yo a las 5 AM para hacer yoga y respirar media hora? Déjame seguir soñando hasta que suene el despertador a las 7 y vuelta a empezar.

Pero cada día un poquito más tranquila.

Namasté.

PD: ¿Qué te ha parecido la Mini Meditación? ¿Te animas a probarla? ¿Tienes ya una práctica de meditación? ¡Cuéntame en los comentarios?